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oscurantismo libertario.
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Ellen Meiksins Wood en De
ciudadanos a señores feudales. Historia social del pensamiento político, desde
la Antigüedad a la Edad Media (2011), explica que la monarquía
absoluta del mundo antiguo inicia con la separación de la producción y la
política. Los productores trabajan para los apropiadores al darles comida,
vestido y alojamiento, quienes trabajan para sí mismos y necesitan la
organización del Estado para mantener el orden y las condiciones que permitan la
apropiación del producto, la enajenación del trabajo y el control sobre las
clases productoras. En una paradoja, el gobierno es un obstáculo y rival del
grupo dominante para apropiarse completamente del trabajo al estar supeditado
al rey, el dueño de la hacienda pública. En el Estado la escritura está en
manos de profesionales y escribas. Los cargos estatales el principal medio de
adquisición de fortunas personales con grandes propiedades exentas de impuestos
y la pequeña propiedad gravada con impuestos, tributos y servicios. La
principal función del Estado no son los "derechos humanos" ni la
"igualdad humana" sino la expropiación del trabajo y la protección de
la propiedad privada de los grupos dominantes: en la monarquía absoluta, los
gobernantes; en la monarquía parlamentaria, los productores con las rentas más
elevadas. En la democracia liberal las corporaciones que financian las campañas
políticas para gozar del monopolio de los sectores productivos
("capitalismo de cuates"), en los regímenes autoritarios las
corporaciones del Partido hasta que otra revolución popular la desplace
("capitalismo de Partido"). Los conflictos entre Estados Unidos
(Microsoft, Facebook) y China (Huawei, TikTok) no son ideológicos sino
corporativos. Ambos Estados enajenan la producción y el trabajo y ejercen el
control sobre las clases productoras. Si el siglo XX condenó el ascenso de las
masas en la política por la postura acrítica frente al poder a cambio de
recibir ventajas sociales (estado benefactor, aclamatorio, plebiscitario,
populista), la concentración del capital con una marcada diferenciación social
que obstruye cualquier forma de interlocución igualitaria (comunicaciones
corporativas), el intervencionismo del Estado a favor de los capitales con la
subordinación de los intereses de la sociedad civil (las realidades económicas fuera
de las realidades democráticas), el corporativismo institucional de intereses
que sustituye al público racional por un público colectivo, aclamatorio y de
derechos delegados (sindicatos, asociaciones patronales, organizaciones), la
influencia de los medios masivos de comunicación que obstruyen el desarrollo de
una esfera pública crítica. El siglo XXI nos enseña que ya no existe la
ingenuidad de pensar que las revoluciones culturales de mercado son exigencias
sociales, los medios de comunicación convierten el activismo político
fraudulento en los nuevos héroes de los capitales internacionales. Paul
Kriwaczek en Babilonia. Mesopotamia: La mitad de la historia humana (2011),
ubica el equivalente de la palabra libertad en el Código Uru.inim.gina (2400
a.C.) con la institución de la amarga "libertad" para
los ciudadanos de Lagash. Meiksins Wood señala que el concepto griego eleutheria "libertad"
no era una liberación del trabajo sino de la necesidad de trabajar para otra
persona: la libertad de trabajo. Las reformas de Solón (594 a.C.) en la
constitución ateniense cambiaron por primera vez la relación entre apropiadores
y productores en una polis de ciudadanos que se gobiernan a sí
mismos para proteger la producción y la propiedad de las clases dominantes: la
abolición de la esclavitud de deuda, la prohibición de préstamos que tuvieran
por garantía la persona, la abolición del estatus del campesinado cuya parte
del trabajo estaba sometida a los propietarios de las tierras, el acceso de la
tercera clase al nuevo Consejo de los Cuatrocientos como contrapeso del Areópago,
admisión de la categoría militar más pobre (thetes) y la creación de un
Tribunal Popular al que todos los ciudadanos tenían acceso. Las reformas de
Clístenes (508 a.C.) eliminaron las funciones políticas de las cuatro tribus
dominadas por la aristocracia, sustituidas por diez nuevas tribus basadas en
criterios geográficos y artificiales (distritos). La división de las tribus
en demes elevaron la jurisdicción por encima de los vínculos
tribales, de clase y de parentesco (oikos): las lealtades locales del
campesinado que trataba los asuntos que más le afectaban y el nuevo papel
legislativo de la Asamblea. Las reformas debilitaron la autoridad tradicional
de la aristocracia al elevar el deme como cuna de la
deliberación que destruyó la relación entre la aldea campesina productora y el
Estado apropiador. La democracia griega era una democracia de productores y
la polis un cuerpo de ciudadanos que no debía rendir tributo a
ningún otro estado. En el capitalismo las clases apropiadoras y productoras son
iguales ante la ley con el sufragio universal que no afecta las relaciones
entre capital y trabajo: "Aquí radica la gran diferencia entre la
democracia antigua y la moderna. En la actualidad, hay un sistema de
apropiación que no depende de las desigualdades jurídicas o de la desigualdad
de derechos políticos. Se trata del sistema que denominamos capitalismo, un
sistema en el que las clases apropiadoras y productoras son libres e iguales
ante la ley, en el que la relación entre ellas es, se supone, un acuerdo
contractual entre individuos libres e iguales, y en el que incluso es posible
un sufragio universal, sin que afecte, de manera fundamental, a los poderes
económicos del capital. El poder de explotación en el capitalismo coexiste con
la democracia liberal, algo que hubiera sido imposible en cualquier sistema en
que la explotación dependiera del monopolio de los derechos políticos. La razón
de que sea posible es que el capitalismo ha creado nuevas constricciones
puramente económicas: la carencia de propiedad de los trabajadores
-o, más en concreto, su falta de propiedad de los medios de producción, los
medios de trabajo- que los obliga a vender su fuerza de trabajo a cambio de un
salario simplemente para acceder a los medios laborales y obtener los medios de
subsistencia… De hecho, únicamente en el capitalismo existe una
esfera económica separada, con sus propios imperativos y, por tanto, sólo en el
capitalismo la democracia puede ser confinada a una esfera
política separada. Asimismo, sólo en el capitalismo se ha puesto gran parte de
la vida humana fuera del alcance de la responsabilidad democrática, regulada en
cambio por los imperativos del mercado y las exigencias del beneficio…"
(Wood, pp. 62, 63). El Renacimiento fue una revolución cultural de mercado
que promovió la idea de la libertad desligada de toda tradición, señorío,
cartas juradas, costumbres, pensamiento religioso o jurídico. La
"libertad, la igualdad y la fraternidad" del Gran Oriente de Francia,
las revoluciones liberales y las revoluciones culturales de mercado. Los
capitales no se acoplan a las exigencias políticas ni a la deliberación
democrática, mucho menos a la construcción de esfera pública. Es el Estado
nación moderno, los organismos supranacionales y el activismo político
fraudulento, los representantes de los capitales: la libertad de inversión, la
libertad de comprar y vender, la libertad de instalar tiendas en cualquier
parte y en cualquier momento sin las restricciones feudales, la libertad de
poseer mujeres como fuerza de trabajo productiva. El Estado nación moderno
emancipó a los individuos de los lazos comunitarios de la época medieval y creó
la libertad tal y como la hemos conocido en el mundo contemporáneo. La primera
ola del feminismo cuestionó la naturaleza de la mujer. La segunda ola la
obligatoriedad del matrimonio. La tercera ola promovió la liberación sexual, los
anticonceptivos y el divorcio. La cuarta ola una mayor unión con el movimiento
LGBT, Queer y de liberación sexual.
Alexandra Kollontai defendía que las relaciones íntimas, la crianza de los
hijos y la reproducción social estaba desfasada desde el punto de vista
histórico: "la familia deja de ser necesaria". Las personas más
productivas son "aquellas liberadas de la familia, la reproducción, la
crianza y los cuidados". Eso suena perfecto mientras sean productivas e
independientes y obtengan buenos sueldos, porque cuando no lo sean, necesitarán
de todas las categorías que los liberales han destruido. El neoliberalismo
traslada las cargas del Estado benefactor a la familia al mismo tiempo que la
debilita. Los imperativos de mercado se convierten en "derechos" y
sus exigencias en "revoluciones sociales". Alguien tendrá que
explicar a las niñas y los niños que antes eran mujeres y hombres, eso si
todavía existe la categoría niñez, la libertad de expresión y el pensamiento
científico, o en su defecto la pederastia legalizada. El liberalismo sólo
concibe a las personas en términos de productividad, las personas no son
eternamente jóvenes y la mayoría ni rentable. La libertad se entiende en
términos estrictamente económicos, la razón de que la niñez ya no sea sujeta de
protección. Cuando los derechos de las mujeres ya no sean un negocio, el mismo
sistema los irá eliminando y convencerá a las mujeres de que la revolución está
en otro lado, algo que ya está ocurriendo con el borrado de la categoría sexo
que justifica la normativa en la materia. El mercado nos ha mostrado las
diferentes formas de mutar el lenguaje para justificar la esclavitud en nombre
de los derechos: "revolución sexual", "trabajo sexual",
"porno feminista", "derecho a decidir", "derecho a
morir bien". El neolenguaje ha hecho que a veces sea mejor no tener "derechos",
el hecho de rechazarlos cuestiona su irracionalidad esclavista. Las abortistas
pueden autoengañarse, pero mantienen la disciplina reproductiva del mercado,
las mujeres no tienen "derecho a decidir", en especial las más
pobres. El aborto es producto de la falta de derechos, no un
"derecho". Y la manera como los empresarios se autoconvencen de hacer
lo mejor para todos al crear fuentes de empleo y mercados sin cuestionar la
naturaleza de los mismos, cualquier cosa que combata la pobreza está
justificada en nombre del progreso: "Los verdaderos propietarios de
esclavos suelen ser hombres de negocios de mediana edad que encajan
perfectamente en la comunidad y no sufren ningún tipo de discriminación social
por lo que hacen. Antes al contrario, su éxito capitalista es objeto de
admiración. Normalmente el negrero tiene otros negocios aparte de los burdeles.
Como es lógico, el dueño de un burdel suele tener relaciones con el crimen
organizado, pero en Tailandia el crimen organizado abarca a la policía y a una
buena parte del gobierno. En realidad, el trabajo del negrero moderno no es considerado
una aberración, sino un perfecto ejemplo de capitalismo desinteresado. Ser
propietario de un burdel con esclavas sólo es un negocio. Los inversores dirán
que están creando riqueza y puestos de trabajo. Sus acciones no revisten
hipocresía, pues obedecen una importante norma social: ganar mucho dinero
justifica prácticamente cualquier cosa. Evidentemente, el propietario de
esclavos que viva en un barrio de clase media no dará ninguna pista acerca de
su trabajo. Sus vecinos sabrán que es un próspero hombre de negocios y lo
respetarán por ello. En la cultura tailandesa, fijarse demasiado en los asuntos
de los demás es una afrenta grave: "no te metas en lo que no te
importa" (yaa suek) es una de las contestaciones más fuertes en el
idioma tailandés. Así pues, el propietario de esclavos explota a mujeres
jóvenes sin que ello tenga ninguna repercusión social sobre él. El propietario
de los esclavos puede ser una agrupación, una compañía o una sociedad
anónima" (Bales, p. 56).
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oscurantismo imperiale.
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En el siglo IV d.C., el imperio romano tenía en las
islas británicas las provincias Máxima cesariana, Flavia cesariana, Britania I,
Britania II. En la península ibérica las provincias de Galicia, Lusitania,
Hispania bética, Hispania cartaginense, Hispania tarraconense. En las Galias
las provincias Galia narbonense primera, Galia narbonense segunda, Galia
aquitánica primera, Galia aquitánica segunda, Galia lugdunense primera, Galia
lugdunense segunda, Galia vienense, Galia belga. En la Germania las provincias
Germania primera, Germania segunda, Germania superior, Bélgica primera
(Tréveris), Recia primera, Recia segunda. En Italia las provincias de Córcega,
Cerdeña, Emilia (Milán), Liguria, Venecia e Istria, Flaminia, Toscana y Umbría,
Piceno, Samnio, Campania, Lucania y Brucio, Apulia y Calabria, Sicilia. En la
Hungría antigua o Panonia las provincias Nórico fluvial, Nórico mediterránea,
Savia, Valeria, Sirmio, Panonia segunda, Dalmacia (Croacia). En Mesia
(Bulgaria, Albania, Macedonia y Grecia) las provincias de Mesia primera, Dacia,
Dardania, Prevalitana, Epiro nuevo, Epiro antiguo, Macedonia, Tesalia, Acaya.
En Tracia (Bulgaria, Grecia, Turquía) las provincias de Escitia, Mesia segunda,
Tracia, Ródope y Hemimonte. En Europa (Turquía) la futura Constantinopla. En
Asiana (Turquía) las provincias de Frigia primera, Frigia segunda, Helesponto,
Lidia, Asia, Caria, Licia y Panfilia, Pisidia, Isauria, Chipre, Capadocia, Cilicia.
En la Póntica (Turquía) las provincias de Bitinia, Galacia, Paflagonia,
Diosponto, Ponto, Póntica, Ponto Polemoniaco y la Armenia Menor. En Mesopotamia
(Iraq) la provincia de Osroene (actual Edesa de Turquía). En Siria la provincia
de Celesiria (Antioquía). En Fenicia la Augusta Libanesa. En Palestina la
Arabia primera y la Arabia segunda. En Egipto el Egipto jupiteriano y el Egipto
Hercúleo. Desde Libia hasta la Mauritania tabia, Mauritania cesariana y
Mauritania tingitana. Roma seguía siendo la capital simbólica del imperio, pero
había dejado de ser un centro político y administrativo de importancia: Milán
(Emilia) y Tréveris (Bélgica primera) en Occidente, Antioquía (Celesiria) y
Constantinopla (Europa) en Oriente, los centros administrativos y políticos
predominantes. El Imperio Romano no tenía nada que envidiar a la Unión Europea
ni a la ONU. Bruselas (Bélgica
primera) la sede de la Comisión Europea y el Consejo Europeo. La Haya (Germania
Primera), la sede de la Corte Internacional de Justicia, la Corte Penal
Internacional, la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, la
Europol, la Agencia de la Unión Europea para la Cooperación Judicial Penal,
OXFAM, UNICEF. La Unión Europea no se hizo en un día, Roma tampoco. Paul Kriwaczek en Babilonia. Mesopotamia: La
mitad de la historia humana (2011), explica que el rey asirio Shamshi
Adad (1813-1781 a.C.), rey de Asiria, de la Totalidad y de las "Cuatro
Regiones del Universo"; se consideraba heredero del antiguo imperio
agadio: Sharru-kinu "rey verdadero" (2300 a.C.), rey de Agade, rey de
reyes y de las "Cuatro Regiones del Universo"; Naram Sin, rey dios de
Agade y de las "Cuatro Regiones del Universo": Mesopotamia, Anatolia,
el Levante mediterráneo e Irán. En su máxima extensión, el Nuevo Imperio Asirio
(siglo X-IX a.C.) dominaba desde el golfo Pérsico hasta los montes del Tauro y
el delta de Egipto. En tiempos de Tiglath Pileser III (744-727 a.C.) la
sociedad estaba militarizada, cada hombre adulto tenía la obligación de servir
en el ejército o pagar su exención. Los tres rangos militares más altos eran
gobernadores de provincias: Comandante en Jefe, Comandante de la Derecha,
Comandante de la Izquierda. Los asirios impusieron una nueva forma de hacer la
guerra con innovaciones tecnológicas que no estaban al alcance de sus vecinos,
a pesar de todo preferían la lucha cuerpo a cuerpo en espacios abiertos, pero
no tenían problemas para asediar ciudades amuralladas. Los asirios buscaban
acuerdos diplomáticos con un matrimonio dinástico o un acuerdo personal, si las
negociaciones fallaban se capturaba la ciudad para provocar la rendición de la
región. Si volvían a fallar, escogían una pequeña ciudad para tomarla,
destruirla e incendiarla con todo tipo de horrores: desollamientos,
decapitaciones, destripaciones, amputaciones, violaciones, empalamientos,
arrancar los ojos, exponer la piel de los desollados vivos en las murallas,
colgar las cabezas decapitadas en estacas o del cuello de los supervivientes.
La idea era que se corriera la noticia y, ante el avance del ejército, la gente
rogara clemencia con la rendición incondicional: "Era el fin del reino
hebreo del norte y (según la tradición religiosa) de las diez tribus que lo
habitaban. Se trajo gente de otros lugares para reemplazar a los que habían
deportado. El propio territorio se incorporó a la misma Asiria y perdió su
identidad. Los anales reales asirios solían narrarlo así: "a la tierra de
Ashur he sumado tierra, a su gente, he sumado gente". Así, para el final
de sus días, el Imperio Nuevo Asirio se había convertido, por accidente o
deliberadamente, en un simple bloque de territorio enorme que incorporaba casi
todo el Oriente Próximo, extendiéndose a lo largo y ancho del Creciente Fértil,
de la costa mediterránea a la cima del Golfo, de Egipto a Elam, un terreno en
que cada habitante era considerado ciudadano asirio; como en el Imperio romano,
después del emperador Caracalla, cada habitante libre podía decir civis
Romanus sum "soy ciudadano romano". Porque los imperios no
pueden sostenerse sólo por la fuerza. La población sometida sólo se someterá al
poder militar por un tiempo. Debe haber también una creencia; debe haber unos
principios. El Imperio Asirio Nuevo descansaba sobre una firme ideología que
siguió siendo modelo para el imperialismo a lo largo de la historia. Debe haber
sólo una tierra. Todo territorio asirio, no importaba si estaba conectado
directamente con el territorio central o separado por Estados serviles, era
considerado igual una provincia de "la Tierra" como parte segura del
patrimonio nacional de la ciudad de Ashur… De ahí las más conocidas penas
impuestas a los Estados conquistados: la deportación de la población y su
reemplazo por otros residentes, habitantes de algún otro lugar del Imperio.
Desde el punto de vista asirio, esto no era un castigo. Era el crisol asirio,
una manera de asegurarse de que, con el tiempo, se olvidase cada etnia que no
fuera asiria y cada lealtad que no fuera al Imperio" (Kriwaczek, pp. 299,
300). Los asirios fueron el modelo del imperio babilonio, persa, helénico y
romano. Tienen la dudosa reputación de heredar la tradición del harén a
Babilonia, Persia, Grecia, Bizancio y Arabia. Al imperio alejandrino le
corresponde el "cosmopolitismo, la igualdad y la hermandad del género
humano". En 331 a.C., Alejandro de Macedonia entró en Babilonia tras
derrotar al rey Darío III de Persia en la batalla de Gaugamela, estableció allí
la capital de su imperio multicultural con una población cosmopolita: persas,
indios, griegos, egipcios y judíos viviendo codo a codo con babilonios,
asirios, armenios y escitas. La cosmópolis alejandrina reemplazaba la
construcción de política en la polis por una comunidad humana
universal (katoliké) que hacía hincapié en la igualdad y la hermandad
del género humano frente a los particularismos de la polis ("derechos
humanos"), traducida en el imperio romano universal (katoliké) y en
la Iglesia universal (katoliké). Si los asirios usaron el poder duro,
los macedonios usaron el poder blando. La cosmópolis alejandrina expulsa de la
vida pública a la ciudadanía activa con el recogimiento de la escuela epicúrea
de la felicidad y la escuela hedonista del placer: las revoluciones culturales
de mercado del activismo político fraudulento. Los derechos humanos reducidos
al ámbito privado como fuente de felicidad y placer en el mercado, el único
lugar de autorrealización. En ese escenario no tiene cabida el hombre elegante
griego que cuidaba sus relaciones con la ciudad y los demás ciudadanos. Tampoco
la dignidad romana que se ejercía en el ámbito público. Mucho menos la construcción
de ciudadanía en las democracias liberales modernas, dejadas en manos de una
burocracia supranacional. El activismo fraudulento interpreta la construcción
de ciudadanía como la destrucción de la ciudad. Fue en el Mediterráneo Oriental
donde las tesis atómicas de Demócrito se juntaron con las de Epicuro para
generar los discursos de la vida extraterrestre como un consuelo a falta de libertad
terrenal. Sin el recogimiento y el sincretismo no se puede entender buena parte
de los evangelios apócrifos como un género de ciencia ficción, mezclado con
militarismo religioso y lecturas apocalípticas. Los imperios estrechan la
esfera pública al ámbito privado y dejan la política en pocas manos: el lobbismo.
Hacer carrera en el imperio implica participar en los organismos supranacionales
de gobernanza global que no son elegidos democráticamente ni le rinden cuentas
a ningún Estado nación con la enajenación de la soberanía: ONU, BM, FMI, BID,
IFAD, OMC, OEA, FAO, OIT, OMS, OMT, UNESCO. Dante Alighieri en De Vulgari Elocuentia
denunciaba los obstáculos de la unidad italiana: los dialectos, el latín
docto elitista, las facciones políticas. Dante aspiraba a una "Luz
nueva" y un "Sol nuevo" que iluminara Italia con una lengua nacional que superara los
dialectos. No era multiculturalista ni indigenista, todos son hijos de Dios y
deben hablar la misma lengua. La Torre de Babel debe ser suprimida. En De Monarquía, propone un gobierno
universal o imperio mundial regido por el pueblo romano, cuya función depende
únicamente de Dios. El gobierno mundial es una teocracia que no depende del
papado para garantizar la paz universal, la justicia y la libertad. Un gobierno
único, un solo monarca del género humano: "derechos humanos".
Dante era un imperialista que apelaba a valores universales. Igual que
Alejandro Magno desde Babilonia hasta la actual Massalia en Francia. Emmanuel
Macron en Francia y Justin Trudeau en Canadá son mini napoleones globalistas que usan los
valores democráticos para subvertirlos:
"Se ha dicho que Alejandro, de hecho, inventó la noción de una cosmópolis,
que recibió su expresión teórica en la filosofía estoica, reemplazando la polis por
una comunidad humana universal, y haciendo hincapié en la igualdad y la
hermandad del género humano frente a los particularismos de la polis…
Pero hacer, en cambio, hincapié en la igualdad y la hermandad entre todos los
seres humanos no es, en general, el modo más obvio de justificar el
sometimiento de algunos de ellos a otros, ya sea en la forma de una monarquía o
en la de la hegemonía imperial. Si Alejandro adoptó esta estrategia paradójica,
lo hizo porque en el mundo helenístico tenía un valor propagandístico especial.
Probablemente, hubiera evocado los principios hondamente arraigados de la
política griega, sus profesiones de libertad e igualdad. Cierto es que
Alejandro, y más aún sus sucesores en sus luchas por el poder, invocaron los
antiguos principios de la eleutheria, de la autonomía e
incluso de la democracia buscando el apoyo de potenciales súbditos a los que prometían
el derecho de vivir bajo sus propias leyes y ancestrales divinidades, libres
del pago de tributos y de guarniciones imperiales. Pero si esto representaba
apelar a los antiguos valores particularistas de la polis autónoma,
la idea (putativa) de Alejandro de la cosmópolis podía haber
estado destinada a transferir aquellos antiguos principios y lealtades
políticas de la polis al estado imperial que todo lo abarca e
incluye, al tiempo que despojaba a la ciudadanía de su ámbito político y
sustituía la ciudadanía activa por la pertenencia pasiva a una comunidad
cósmica" (Wood, pp. 133, 135).
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oscurantismo mercantile.
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Los comerciantes de la Lombardía, la Toscana, Venecia y Génova se
convirtieron en empresarios internacionales y banqueros durante el siglo XV.
Los nobles italianos abandonaron las armas con la privatización de la guerra en
los condottieri para dedicarse a los negocios. La revolución capitalista es producto del Renacimiento
en la Toscana y la Lombardía en el siglo XV y XVI, mal visto por reemplazar la
moral ascética de la Edad Media por una revolución burguesa en la cultura que
promovía el interés privado sobre la colectividad, una aristocracia de la
sangre y el dinero desligada de los valores ultraterrenales y dedicados a los
goces del mundo. El amor de Francisco I de Francia por la literatura, la
filosofía y el arte surgió en sus viajes por las cortes italianas, llevando a
sabios humanistas y pintores como Rosso Fiorentino, Francesco Primaccio,
Benvenuto Cellini, Andrea del Sarto y Leonardo Da Vinci. Los duques de Borgoña
Felipe el Bueno y Carlos el Temerario se rodeaban de artistas, pintores,
músicos y fundaron una biblioteca: los pintores flamencos Jan van Eyck, Roger
van der Weyden, Hans Memling. El amor por las artes de la familia Médicis
transformó la condición social de los pintores en el Renacimiento: Agnolo
Bronzino, Sandro Botticelli, Andre Verrochio, Domenico Ghirladaio, Leonardo Da
Vinci, Donatello y Miguel Ángel. Los reyes y los nobles más poderosos se
distinguían por tener las colecciones más importantes de arte. Para triunfar en
las cortes había que tener un séquito de creadores de cultura que abrieran
todas las puertas. Gracias a la competencia entre los nobles por distinguirse,
y entre los creadores por los puestos en la corte, fue que se desarrolló la
estética de la modernidad. La aristocracia letrada
veía a los monjes con lástima y desprecio. Estos empezaron a surgir del pueblo
llano y la baja burguesía, ejercían el apostolado popular para obtener un
ingreso, perdiendo el prestigio franciscano y dominico, y los relatos piadosos
fueron sustituidos por el escándalo y la burla laica. El Renacimiento ponía al
hombre en el centro del mundo como medida de todas las cosas, el libre albedrío
permitía la construcción de una brújula moral propia, en la práctica al alcance
de una élite intelectual. El pueblo al perder la brújula se abandonaba a sus
inclinaciones y deseos, el mejor ejemplo de que la libertad es un concepto que
requiere formación para ejercerse. El libre albedrío puede usarse para elegir
el bien o mal, pero implica asumir las consecuencias morales que la
posmodernidad evade en nombre de la "libertad espiritual": "Te
coloqué en el centro del mundo, para que volvieras más cómodamente la vista a
tu alrededor y miraras todo que hay en ese mundo. Ni celeste, ni terrestre te
hicimos, ni mortal, ni inmortal, para que tú mismo como modelador y escultor de
ti mismo, más a tu gusto y honra, te forjes la forma que prefieras para ti.
Podrás degenerar a lo inferior, con los brutos; podrás realzarte a las cosas
divinas, por tu misma decisión" (Pico. "Discurso sobre la
dignidad", 105). Por obvias razones la revolución renacentista era un
problema moral para la Iglesia como tutora de la sociedad, pocas personas están
inclinadas al bien por libre albedrío, la razón de que Maquiavelo llegara a la
conclusión de que los hombres están inclinados al mal: "Al librarse el
Renacimiento de la moral ascética de la Edad Media, no la sustituyó con ninguna
otra. Las almas más nobles y más fuertes se impusieron un ideal de virtud y
dignidad; para otras, la gloria fue el móvil dominante. Pero la mayoría parecía
obedecer únicamente a las reglas de interés personal o se dejaba conducir por
sus inclinaciones o sus pasiones. El relajamiento de los lazos conyugales, la
frecuencia de los asesinatos, los envenenamientos y de toda clase de perfidias
en todos los rangos de la escala social, atestiguan una crisis moral indudable.
Y sin embargo, se va a apuntar, en medio de ese desorden, el sentimiento de la
libertad individual, el de la dignidad del hombre, el de la belleza, el de la
energía y el de la responsabilidad del individuo ante su propia conciencia… Indudablemente,
ésa era una concepción aristocrática, por lo menos en el sentido de que muy
pocos pudieron llegar a ella" (Pirenne, p. 376). El modelo del siglo XXI
es el de los esclavos satisfechos, la negación, la evasión y el recogimiento epicúreo
y hedonista como nuevos "derechos". La guerra y la formación militar
también son una paideía, la dignidad romana
era aristócrata, ligada al ejercicio del poder con
la conducta moralmente intachable, la nobleza, la grandeza y la disciplina, lo
contrario de cualquier gobierno democrático liberal: "De la integridad nace
la dignidad; de la dignidad, el honor; del honor, el mando; del mando, la libertad" (Scipio
Aemilianus). La dignidad exigía la debida representación, la presencia, los
distintivos del rango, los ademanes, las actitudes, el ropaje, la forma de
vida, la forma de caminar y de hablar. La
dignidad no se adquiere por nacimiento ni por prebenda jurídica, sino por
formación. El estilo moderno es una copia, cualquier persona puede vestir como
quiera sin que sea representativo de su dignidad ni de sus valores. El Logos
discurso, la formación, y por extensión el gusto, siguen siendo el principal
diferenciador social. El
concepto dignidad aparece en el artículo 1 de la Declaración Universal de los
Derechos Humanos del 10 de diciembre de 1948: "Todos los seres humanos
nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y
conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros". En el
imperio romano no existían los derechos humanos por la visión del cosmos que
dividía a los seres en tres categorías: por encima de la humanidad, los seres dotados
de poderes de mayor o menor magnitud, que compartían la característica de estar
constituidos de puro espíritu; los seres humanos que constaban de dos
elementos, un espíritu y un cuerpo, por encima de los animales que
representaban la materia pura. Los seres humanos se dividían en racionales e
irracionales, en los racionales el espíritu controlaba el cuerpo, en los
irracionales el cuerpo dominaba la mente como los animales y la esclavitud
oficializaba su irracionalidad. En el mundo antiguo los adictos al alcohol, el
sexo y las riquezas mundanas, en el presente los adictos a las drogas, la
prostitución y la pornografía. La democracia es un sistema de gobierno que los
promueve al estar supeditada a los imperativos del mercado y las exigencias del
beneficio. Los deseos, las orientaciones y las inclinaciones no son fuente de
racionalidad ni de derecho. La libertad del mundo bárbaro es ilusoria, rebaja
la igualdad a la esclavitud de los espíritus, la libertad a la esclavitud del
cuerpo, esclavos de sus sentidos y fuente de opresión. Desde la óptica romana y
kantiana, los seres racionales son los únicos que pueden tener derechos humanos
y una esfera moral propia, ni los irracionales ni los animales. Incluso
extenderían la noción humanidad a la inteligencia artificial por la capacidad
de tener fines por medios racionales. Sólo basta revisar el concepto de dignidad humana moderna
como autonomía moral de los seres racionales en Kant: "La necesidad práctica de obrar conforme a este principio,
es decir, el deber, no se basa en sentimientos, impulsos ni inclinaciones, sino
simplemente en la relación de los seres relaciones entre sí, (relación) en la
que LA VOLUNTAD DE UN SER RACIONAL debe considerarse a la vez como LEGISLADORA,
porque de otro modo no podría pensarse como FIN EN SÍ MISMA. Así pues, la RAZÓN
refiere toda máxima (o regla de actuación) de la voluntad como universalmente
legisladora a cualquier otra voluntad y también a toda acción respecto de sí misma,
y no por algún otro motivo práctico o ventaja futura, sino por la idea de
dignidad de un ser racional que no obedece a ninguna otra ley sino aquella que
él mismo se da. En el REINO DE LOS FINES todo tiene o bien un precio o bien una
dignidad. Lo que tiene precio puede ser reemplazado por alguna otra cosa
equivalente; por el contrario, lo que se ELEVA SOBRE TODO PRECIO y no admite
ningún equivalente tiene una dignidad. Cuanto se refiere a las inclinaciones y
necesidades humanas tiene un precio de mercado; lo que, sin suponer una
necesidad, se adecuó a cierto gusto, es decir, a un bienestar basado en el
juego sin propósito de nuestras facultades anímicas (un objeto estético, por
ejemplo, o un objeto particularmente vinculado a nuestros sentimientos), tiene
un precio de afecto; pero lo que constituye la CONDICIÓN ÚNICA bajo la cual
puede ser FIN EN SÍ MISMO no tiene meramente un valor relativo, o sea un
precio, sino que tiene un valor intrínseco, es decir, DIGNIDAD. La moralidad es
aquella condición bajo la cual un ser racional puede ser un fin en sí mismo,
puesto que sólo por ella es posible ser miembro legislador en un reino de los
fines. Así pues la moralidad y la humanidad en cuanto a que es capaz de
moralidad son lo único que posee dignidad. La habilidad y la ambición en el
trabajo tienen un precio comercial; la gracia, la imaginación viva, el ingenio,
tienen un precio de afecto; en cambio, la fidelidad en las promesas, la
benevolencia por principios (no por instinto), tienen un valor interior"
(Kant, p. 19).
Las revoluciones liberales impulsadas por los panfletos
que inundaban París desde Londres, el cuartel de los sants culottes "sin
calzones", escritores pobres que se ganaban la vida con la crítica y la
extorsión: los "Voltaires de alcantarilla". Virgilio, Ovidio, Tito
Livio y Plinio llamaron indígena al pueblo latino originario del antiguo Lacio
para distinguirlo de los que habían nacido en otro lugar como gen fraterna. La palabra indígena
reaparece en El Dictionnaire de l'Academie Francoise de 1798,
se comienza a llamar indígenas a los indios americanos a partir de 1840. El
primero en responder a los medios liberales fue el papa Pío IX en el Syllabus de
1864 que antecede el Concilio Vaticano I de 1869 para hacer frente a los retos
revolucionarios de los "nuevos tiempos", el mismo año en que el
escritor judeohúngaro Karl María Kertbeny "Benker" usa la palabra
"homosexual" y "normosexual" en 1869, la aparición de la
palabra "lesbiana" en 1870: "Diez años después, se producen
novedades y evoluciones en todos los ámbitos: la industria, la política, las
luchas sociales… En los medios de comunicación son impresionantes; es como si
el mundo habitual en el que se movía el papa y su generación experimentara un
rápido ocaso. Como cabeza espiritual, Pío IX ve en dicho ocaso el peligro de
que Iglesia deje de ser el eje, el punto de referencia de la moralidad humana…
El Syllabus resume las inquietudes del papa. Es un documento
en el cual condena sin reservas el progreso y toda aportación de los nuevos
tiempos: el liberalismo, la civilización moderna y la libertad, incluida la de
prensa y la de pensamiento. Pío IX considera graves errores el divorcio, la
abolición del poder temporal, la hipótesis de que el catolicismo deje de ser la
única religión del Estado y la idea de que la Iglesia pueda separarse del
Estado… Define el socialismo como un "error funestísimo"; considera
las sociedades liberales que se van asentando en Occidente una maldición, y se
convierte en una obsesión para él, pues teme, no sin razón, que la modernidad
vaya acompañada de indiferencia religiosa… Son palabras que, indudablemente,
captan uno de los aspectos de la modernidad. La sociedad de masas también es
eso, la concupiscencia y la opacidad de los valores caracterizan muchas
culturas contemporáneas, dominadas por el frenesí del dinero y el consumo. Los
riesgos que el papa entrevé, encerrado en la ciudadela de Pedro, son los mismos
que indican los mayores pensadores contemporáneos, en particular durante la
segunda mitad del siglo XX" (Augias, pp. 148, 149).
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Il
oscurantismo sensibile.
NﺱNﻖNشNﺱNﻖNﻖN
Tres años después de la revolución rusa de 1917, el 18 de noviembre de 1920, el Comisario del Pueblo para la Salud y la Justicia publicó un decreto sobre la terminación artificial del embarazo de manera gratuita, con el compromiso de erradicarlo en cuanto mejoraran las condiciones de vida, cosa que nunca ocurrió. El régimen soviético combatía la familia por ser uno de los tres pilares de la burguesía junto con el zarismo y la propiedad privada. En 1918 la liquidación del viejo código penal excluyó las penas de los actos de sodomía consentidos entre adultos y la medida se confirmó en mayo de 1922 con la entrada en vigor del nuevo código penal. La URSS suprimió el matrimonio religioso, abolió la autoridad marital y paternal, promovía el divorcio libre y la igualdad absoluta de los niños ilegítimos. Los desacuerdos llegaron con la política sexual que rompe su relación con la naturaleza. La sodomía estaba despenalizada, pero no significaba que la sociedad rusa la aceptara. La contrarrevolución de Stalin decretó la nueva penalización de la homosexualidad en mayo de 1934. Wilhem Reich fue expulsado de la sección alemana del Partido Comunista por su giro político en los treinta, quien en su artículo "La Revolución Sexual" señalaba a la legislación soviética como la más progresiva de la época, lamentando su retroceso estalinista. La agenda de los organismos supranacionales de gobernanza global no es estalinista ni maoísta, tampoco el modelo de la democracia autócrata de Putin ni el neoliberalismo del PCCh, sino leninista. La democracia liberal occidental está experimentando una ingeniería social cuyas tesis descienden de las sectas heterodoxas medievales que rechazaban la Iglesia, la familia, la propiedad y la reproducción, y promovían la abstención voluntaria de la leche, la carne, los huevos, el vino y el sexo. La expropiación de los bienes en comunas redistributivas, cuya mutación neoliberal fue privatizar el Estado a los capitales internacionales. En ambos modelos se puede rechazar la Iglesia, la familia, la propiedad y la reproducción, ambos sistemas niegan la materia y legalizan el robo que hace inviable la reproducción social: expropiación, privatización. La clase media sólo puede existir en el capitalismo con la inmunidad de la propiedad privada, la clase revolucionaria expropia y la clase neoliberal privatiza, una enajenación de la propiedad que no ocurría en la democracia griega, al menos no en los ciudadanos (la edad de oro de la esclavitud); en la democracia romana (categoría dominium) ni en la Edad Media (blindaje tomista de la propiedad privada de las autoridades eclesiásticas y seculares que quisieran afirmar algún tipo de dominio sobre los bienes). En la Edad Media, las ideas heterodoxas encontraron eco en los franciscanos. Juan Duns Escoto (1266-1308) postulaba un estado de inocencia donde todas las cosas eran usadas en común por derecho natural, pero no implicaba la propiedad ni la posesión comunitaria, relaciones en la sociedad civil que no eran naturales, aunque fueran usadas para mantener la paz y el orden. La tesis franciscana promovía la idea de que Dios había dado el mundo para su uso en común, ninguna persona ni corporación podía afirmar su derecho de propiedad en la naturaleza. La Iglesia y el Estado eran administradores, pero la propiedad pertenecía a Dios. La revolución socialista convirtió a las mujeres en una nueva fuerza laboral al destruir los obstáculos que impedían su incorporación al trabajo (familia tradicional), regímenes puritanos donde las fuerzas sexuales debían trasladarse a la producción y a los objetivos revolucionarios, incluyendo la elección de pareja. En los sistemas capitalistas del siglo XX y neoliberales del siglo XXI, la fuerza de trabajo que permite rebajar los sueldos y las condiciones laborales con la guerra de sexos. Las mujeres no ganan menos porque sean mujeres, sino porque son el ejército laboral de reserva. Tienen mayor disposición o necesidad de aceptar condiciones laborales infames que los hombres. La bandera LGBT ahora es el nuevo ejército laboral de reserva con la flexibilidad total (productiva y reproductiva), esclavos de la producción. La gente no nace para ser libre e igual, nace para trabajar, y los más pobres son capaces de aceptar la flexibilidad que exige el mercado en todas las áreas, incluyendo la de las niñas y los niños: "¿Qué ganaron las mujeres con los años revolucionarios? Lenin insistía con orgullo en el éxito bolchevique: "Ni un solo Estado... ha hecho siquiera la mitad de lo que el Gobierno Soviético hizo por las mujeres en los primeros meses"... Las nuevas leyes sobre la familia se ocuparon del dominio de la unidad doméstica por parte del padre, introdujeron el matrimonio civil y el divorcio libres, abolieron la ilegitimidad y legalizaron el aborto. También se tomaron medidas en relación con el trato que recibía la mujer en el Asia Central musulmana. Este era el programa máximo del feminismo occidental, que ningún gobierno de Occidente jamás estuvo cerca de aceptar. El tratamiento de la maternidad como responsabilidad social era el lado oculto... Para Kollontai, la comisaria de Asistencia Social, la vida colectivizada liberaba a las mujeres de la familia para que pudieran cumplir sus obligaciones como trabajadoras y madres. Argüía, que, de hecho, adscribir las relaciones íntimas, la crianza de los hijos y la reproducción social estaba desfasado desde el punto de vista histórico: "la familia deja de ser necesaria"... Si el legado de la revolución rusa no fue fructífero para las mujeres, el estalinismo sepultó el asunto en el silencio. En 1917-1930 el partido dio a conocer 301 decretos y resoluciones sobre la "mujer"; durante los siguientes treinta años, sólo tres" (Eley, pp. 190, 191). El aborto en Cuba (1965), Reino Unido (1967), Canadá (1968), Alemania (1972), Estados Unidos (1973), Dinamarca (1973), Suecia (1974), Noruega (1975), Francia (1975), España (2010), Uruguay (2012), México (2012), Irlanda (2018). El matrimonio gai en Países Bajos (2001), Bélgica (2003), España (2005), Canadá (2005), Sudáfrica (2006), Noruega (2009), Suecia (2009), Portugal (2010), Islandia (2010), Argentina (2010), Dinamarca (2012), Francia (2013), Uruguay (2013), Nueva Zelanda (2013), Brasil (2013), Reino Unido (2014), Estados Unidos (2015), Luxemburgo (2015), Irlanda (2015), Colombia (2016), Malta (2017), Alemania (2017), Australia (2017), Finlandia (2017), Austria (2019), Ecuador (2019), Taiwán (2019), Costa Rica (2020). En el año 3500 a.C., Sumeria era la región más poblada del mundo con medio millón de habitantes, en el año 1000 la población mundial de 300 millones (un poco menos que la población de Estados Unidos), en 1750 los 750 millones con una tasa de crecimiento del 133 por ciento, en 1800 los 1.000 millones, en 1900 los 1.600 millones, en 1927 los 2.000 millones, en 2003 los 7.200 millones con una tasa de crecimiento de 1,2% y dentro de 58 años (2061) la duplicación será de 14.400 millones. El 80,7% de la población se concentra en las regiones del mundo menos desarrolladas y sólo tienen acceso al 20% de los recursos, aunque la mitad de la población está asentada en las grandes ciudades. En 1880 Estados Unidos era el país más contaminado del mundo en la segunda revolución industrial, en 2008 China, en 2020 China (10.065 millones de ton. de CO2), Estados Unidos (5.416 millones de ton. de CO2) e India (2,654 millones de ton. de CO2). El ranking de las diez ciudades más ruidosas de la OMS: Nueva Delhi, el Cairo, Mumbai, Estambul, Beijing, Barcelona, CDMX, París y Buenos Aires. China encabeza el país con el mayor número de ciudades ruidosas: Beijing, Cantón, Pekín, Shanghái, Hong Kong. Las cifras de la OMS vinculan las principales causas de muerte con el medio ambiente (contaminación del aire, agua y suelo, productos químicos y radiación ultravioleta) y la obesidad con un aproximado de 105 millones en 4 años (2012-2016: equivalente al comunismo o las dos guerras mundiales; las dos pestes negras juntas): cardiopatía isquémica y accidente cerebro vascular (75 millones), enfermedad pulmonar obstructiva crónica (15 millones) e infecciones de las vías respiratorias (15 millones). La principal causa de muerte de mujeres y hombres es el corazón con un aumento de las enfermedades mentales y el consumo de antidepresivos y ansiolíticos en los países más desarrollados y afectados por la crisis económica internacional. En menos de tres siglos el sostenimiento del planeta está en peligro, de nada sirven las políticas de natalidad si la industria y la posindustria tienen mayor impacto en la naturaleza y la salud: carbón, gas, petróleo y los metales pesados. La piedra es un material igualitario y democrático, pero sería difícil convencer a los "igualitarios" de regresar a la Edad de Piedra por los "lujos" de las sociedades estratificadas. Los mismos y las mismas que piden igualdad, exigen la libertad de mercado que genera las grandes desigualdades económicas y las relaciones de explotación. O vives en sistemas que limitan las libertades en nombre de menores diferencias de poder y riqueza, aunque sea en la miseria bananera. O en sistemas de absoluta libertad con la complicidad del activismo político fraudulento que convierte las desigualdades estructurales en diferencias culturales: antropología, sociología. La "Civilización" limita la igualdad y la libertad, agravada por las tecnologías de biocontrol. La libertad y la igualdad se perdieron en el Paraíso con el pecado original de la reproducción, la propiedad, la jurisdicción y el gobierno: "Te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la misma tierra de la cual fuiste sacado. Porque polvo eres, y al polvo volverás" (Génesis 3:19). La Civilización nos hace menos libres, iguales y responsables, para todo existe una causa ajena al individuo, producto de fuerzas y relaciones de las que no tiene la menor responsabilidad moral: "La utopía no siempre ha tenido un carácter revolucionario o, siquiera, político (al menos, no abiertamente). En muchas culturas y a lo largo de la mayor parte de la historia, la humanidad ha vivido obsesionada por la idea de una sociedad perfecta, pero la ha interpretado como el recuerdo de un paraíso perdido antes que como una visión de un futuro alcanzable. Platón situó su república ideal en una edad de oro anterior a la historia, y, hasta hace apenas doscientos años, las sociedades perfectas imaginadas solían estar emplazadas en un pasado irrecuperable, cuando no en lugares distantes no recogidos en mapa alguno… La búsqueda de un estado de armonía es el rasgo definitorio del pensamiento utópico y el que revela su irrealidad fundamental. Pero el conflicto es un elemento universal de la vida humana. Los seres humanos parecen estar naturalmente destinados a querer cosas incompatibles entre sí: emoción y tranquilidad, libertad y seguridad, la verdad y una imagen del mundo que halague su engreída vanidad. Una existencia desprovista de conflictos es algo imposible para los seres humanos y, siempre que se intenta conseguir, el resultado acaba siendo intolerable para ellos. Si se cumplieran los sueños humanos, el resultado sería peor que cualquier utopía frustrada… Pero, de todos modos, la posibilidad de una vida sin conflictos no deja de tener un fuerte atractivo. En el fondo, se trata de la misma idea de perfección atribuida en algunas tradiciones a Dios. En la religión, la idea de perfección responde a una necesidad de salvación individual. En la política, expresa un anhelo parecido, pero pronto choca frontalmente contra otras necesidades humanas… Todos los sueños sobre sociedades de las que se destierren para siempre la coacción y el poder –ya sean de signo marxista, anarquista, liberal o tecnocrático- son utópicos en el sentido estricto de que no podrán cumplirse jamás porque se estrellarán contra las contradicciones permanentes de las necesidades humanas" (Gray, pp. 30, 33, 37).
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Benedettini & Gyrovagus.
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En el siglo III los primeros monjes cristianos eran ascetas que se refugiaban en el desierto para alcanzar la santidad a través del hambre. El egipcio Antonio fue uno de los primeros monjes cristianos, un joven de diecinueve años que pertenecía a una familia rica. Cuando sus padres murieron empezó a escuchar voces, regaló su herencia, se fue a vivir a un cementerio en los límites de la ciudad durante veinte años, tuvo visiones, rechazaba la autoridad, no se aseaba y vivía solo. El egipcio Ammon, discípulo de Antonio, convenció a 5.000 personas para que se unieran en el desierto de Nitre, en Alejandría. La mayoría de los monjes eran analfabetos, arruinados que escapaban de los impuestos, desertores del ejército, bandoleros y esclavos fugitivos. La leyenda de Macario de Alejandría afirma que no durmió veinte noches seguidas, se expuso siete meses a los mosquitos de los pantanos y ayunó cuarenta días en una celda. En el siglo IV los monjes cenobitas vivían en comunidades, agrupados por San Pacomio en un monasterio de Taberna en el Nilo: tejedores, fabricantes de esteras, sastres, carpinteros, abatanadores y zapateros. Hilarión introdujo en Siria el movimiento monástico, pero encontró anacoretas o monjes solitarios que vivían de la caridad, practicaban la autotortura o la privación dramática: cargar un hierro tan pesado y avanzar apoyado con las manos y las rodillas, crear celdas que los obligaban a vivir doblados, pasar diez años dentro de una jaula que tenía forma de rueda. Simón Estilista vivía en una cisterna y se encerraba sin alimentos durante la Cuaresma. Su cadena unida a una piedra le impedía avanzar, y el hueco entre la piel y la cadena estaba infestado de gusanos. En Antioquía vivía atado a un poste sobre una columna de veinte metros. En el siglo V falleció después de pasar treinta y siete años sobre su columna. En el siglo VI aparecen los flagelantes. ¡No es la base militar de Guantánamo! ¡Son los primeros monjes del cristianismo! La disociación mental o "mente pura" era la forma de alcanzar la santidad mediante la mortificación de la carne como causa del placer y del pecado. El arrianismo de Luciano de Antioquía, Eusebio de Nicomedia, Arrio y Wulfila con bases cristianas separadas a partir de la persecución romana. Los primeros concilios rechazaron el arrianismo y quedó proscrito: el Edicto de Milán de 313 reconoció legalmente el cristianismo, la Biblia gótica de Wulfila en Nicópolis (Bulgaria) para convertir a los godos; I Concilio de Nicea de 325, Concilio de Constantinopla de 381, Concilio de Éfeso de 431 y Concilio de Calcedonia de 451 que declararon herético el arrianismo con la sustancialidad trinitaria que produjo un cisma entre clérigos. Dos eventos cambiaron la historia: la caída del imperio romano de Occidente con la embestida goda arriana y persa sasánida, la inacción del imperio romano de Oriente por considerar invasiva la política de Roma (actual Iglesia ortodoxa rusa) y la expansión goda en el suroeste de Crimea, el Bósforo Cimérico, Dori, el reino ostrogodo de Italia, el reino visigodo de Tolosa y el reino visigodo de Toledo con el triunfo del cristianismo arriano en Occidente. Las estructuras clientelares y los grupos de choque son propios de la democracia liberal de los productores, pero en las antiguas elecciones episcopales de Alejandría se permitía la votación de todos los cristianos, las distintas facciones compraban el voto en el pueblo para beneficiar su causa y usaban grupos de choque reclutados entre los parias: "El empleo de dinero para manipular a las turbas de esclavos y pobres en un sentido doctrinario específico había sido uno de los rasgos más tempranos del cristianismo. La tendencia se acentuó todavía más en una etapa posterior del Imperio, con la aparición de las corporaciones de mercaderes y artesanos, de hecho sindicatos hereditarios y obligatorios, que unían a sectores de la comunidad en grupos firmemente organizados, cada uno con su propia serie de intereses económicos y sociales, y cada uno inclinado a recibir soborno o dejarse persuadir. Hacia el siglo IV actuaron en la esfera religiosa, influyendo o incluso determinando el resultado de las elecciones episcopales donde éstas aún permitían la intervención de la población entera de cristianos… El monasquismo atraía a los inadaptados, los quebrados, los criminales, los homosexuales y los fugitivos como a los piadosos: era también una profesión para los jóvenes toscos campesinos a los que se podía ejercitar como miembros de regimientos monacales bien disciplinados que actuaban como parecía conveniente a un obispo inescrupuloso. Se los llevaba en bandas a los Concilios de la Iglesia para forzar a los delegados hostiles y tratar de influir sobre el resultado… Había millares de monjes alejandrinos que supuestamente trabajaban atendiendo a los dolientes en las enfermerías de la ciudad, los leprosarios y otros establecimientos. Eran propensos a provocar disturbios tan pronto recibían la señal del obispo. Un edicto imperial del año 416 trató de limitar su número a 500, expulsando al resto, y se les prohibió interferir en los asuntos municipales o en las cuestiones judiciales… El trabajo y el ejemplo de los monjes alejandrinos gradualmente se difundió a través de la cristiandad oriental y originó el fenómeno de la "turba religiosa". Los obispos alejandrinos que había organizado turbas para aplastar a los arrianos y nestorianos pronto fueron imitados por sus rivales de Antioquía" (Johnson, pp. 131, 132, 133). En 500 Benito de Nursia fundó un monasterio en Monte Casino, en las cercanías de Nápoles, con la regla de tres votos perpetuos de obediencia, pobreza y castidad, la obligación de honrar a Dios con el trabajo manual o el estudio porque el ocio es el "padre de todos los vicios": trabajos alternativos o agrícolas, lectura, comida, reposo y oración según las estaciones. El cristianismo hizo que la educación fuera accesible al pueblo llano porque el cielo estaba abierto para todos con el arte de la gramática y la retórica, exclusivo de la clase gobernante antigua. Las parroquias y los cenobios de oblatos las nuevas escuelas y los priores fratres los ludigimagistri. La Regula Benedicti de 540 prescribía las normas de la Regula Magistri o Sanctorum Patrum. En el prólogo San Benito distingue cuatro especies de monjes: los cenobitas que viven bajo la regla, los anacoretas eremitas que después del cenobio afrontan la experiencia de la soledad, los sarabaítas que viven sin regla y solos o en pequeños grupos, los giróvagos criticados por Benito. Los giróvagos (gyrovagi) o clérigos vagos (clerici vagantes, "goliardos") de distinta procedencia que escuchaban las lecciones de un famoso hombre docto y acostumbraban a dejar sus monasterios o colegios canónicos sin permiso de sus superiores para visitar otros, donde sólo se quedaban pocos días, el antecedente de los profesores de la Universidad medieval: "Por otra parte, si no está previsto expresamente que el novicio analfabeta aprenda las letras, sin embargo, en el hablar de los vestidos y de los calzados de los frailes, y de cualquier otra pertenencia, se prescribe que, a fin de que el vicio de la propiedad sea totalmente erradicado, el abad provea todo lo que sea necesario, o sea, la cogulla, la túnica, las sandalias, los zapatos, el cinturón, el cuchillo, el estilo (graphium) los pañuelos, las tablillas (tabulas), de modo que no exista ningún pretexto de necesidad (Reg. 55)… Existe la preocupación que cada uno duerma en una cama propia, que los monjes más jóvenes no tengan camas vecinas, sino intercaladas con la de los más ancianos, y que en el dormitorio una lámpara permanezca encendida hasta la mañana (Reg. 22). Y los castigos se consideran algo normal. Lo son para los monjes adultos, para los cuales se prevén, con creciente gradualidad, la advertencia secreta una o dos veces, la reprobación pública, la excomunión, que consistía en la exclusión del trabajo, de la mesa y de la liturgia en común, y finalmente la expulsión del convento, que a la tercera vez tenía carácter definitivo (Reg. 23 y 28)… La regla 70 aconseja, "en cuanto a los niños hasta la edad de quince años, que todos los traten con atenta disciplina y vigilancia, siempre moderada y atentamente" (Reg. 70,4). Y si la desigual relación pedagógica está netamente marcada por la advertencia de que el maestro debe hablar y enseñar, y el discípulo callar y escuchar (Reg. 6,6), sin embargo estamos ante la novedad de una relación amorosa, ya que se recomienda no sólo que "los más jóvenes honren a los más ancianos, sino también que los más ancianos amen a los más jóvenes" (Reg. 63,10)" (Manacorda, pp. 182, 183, 184). Boecio (480-524) fue el primero en nombrar el cuadrivium: aritmética, geometría, astronomía y música. Isidoro de Sevilla (560-636) dividía la filosofía en física, lógica y moral, a la lógica en dialéctica y retórica, atribuía a la física el cuadrivium, al que sumaba la astrología, la mecánica y la medicina. El Concilio de Toledo de 633 recomienda que los muchachos del clero se hospeden en una estancia del atrio y pasen los años de su formación a cargo de un venerable anciano en las disciplinas eclesiásticas. La Regula canonicorum o Regula Chrodegangi del obispo de Metz, instituía escuelas canónicas en las iglesias de las ciudades y que los rectores cuidaran a los niños y adolescentes bajo el yugo de la disciplina con la idea de promoverlos a los grados eclesiásticos. En el siglo VII y VIII los monasterios benedictinos se extendieron en Italia, el sur y el norte de Francia. La Epistula del 787 señala que los eclesiásticos debían dedicarse a la enseñanza. En 800 la educación de los monasterios y las parroquias pasó a la jurisdicción del Estado cuando Carlomagno fue ungido rey sacerdote al ocupar la dignidad imperial y la dignidad real de Cristo. Los Concilios de Chalons y Tours de 813 apelaron a los dictados del emperador, todo futuro sacerdote debía permanecer en el obispado para aprender su oficio, la sede de la instrucción de los religiosos bajo la atención del Estado. En el 825 Lotario en el Capitolare olonese libera a la Iglesia del deber de instruir a los laicos y estableció las primeras escuelas públicas bajo la dirección del Estado en las ciudades de Turín, Pavía, Cremona, Florencia, Fermo, Vicenza, Cividale e Ivrea. En el Concilio de Turín de 829, los obispos pidieron a Lotario que el clero no sea obligado a instruir a los laicos y que al menos en las tres sedes más adecuadas se hicieran escuelas públicas por iniciativa del clero, que esperaba controlar la nueva política educativa. Eugenio II (824-827) inauguró la legislación pontificia sobre las escuelas episcopales. El Concilio romano de 826 estableció que los obispados y las parroquias tuvieran cuidado en nombrar a los maestros y doctores que enseñaran las letras, las artes liberales y los sagrados dogmas. El Concilio romano de 853 establecía que las escuelas en las sedes episcopales estuvieran reservadas a los clérigos y las escuelas parroquiales de nivel inferior abiertas a los laicos para que tuvieran un primer adoctrinamiento religioso. En 910 la reforma de Cluny cuando el duque Guillermo de Auvernia fundó un pequeño monasterio bajo la dirección de Odilón de Mercour (Odón de Cluny) para encauzar el pensamiento religioso con la regla de San Benito. La reforma incluyó la condenación del matrimonio de los sacerdotes, la observancia estricta del derecho canónico, la sumisión del laicado y el reconocimiento de Cristo como el único potentado: Francia, Italia, Flandes, Lotaringia, Alemania.
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Francmaçon & Clerici Vagi.
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La palabra maçon "masón"
debe nombre a las logias donde celebraban asambleas los miembros de los
colegios de arquitectos romanos: la maceríe, situada junto a los
templos de aquellas divinidades a las que veneraban más y cuyos sacerdotes
empleaban a los agremiados como arquitectos o proveedores de utensilios
utilizados para el culto. El origen de la francmaconería y
los maceros medievales de las comitivas municipales y las
corporaciones. El rey Numa Pompilio, hijo de Rómulo, según la tradición,
instituyó los collegia fabrorum que guardaban los misterios y
secretos del arte y las tradiciones religiosas, dirigidas por el
triángulo del tres faciunt collegium que incluía un Magister y
dos Decuriones con tres grados que se extendieron en el imperio romano para
construir campamentos militares (Castrum) que se convirtieron en ciudades:
Galia, Hispania, Germania y Britania (Chester). El triunfo del cristianismo
hizo que los misterios antiguos desaparecieran, el collegia fabrorum adaptó
las antiguas creencias a la nueva fe y convirtieron al Dios Baco en San
Dionisio, al Dios Jano en San Juan y a Isis en la Virgen María. Los maçones en
el siglo XI recuperan el arte románico con el arco de medio punto, la bóveda de
cañón y la de aristas para los castillos, puentes, palacios, iglesias y
ermitas. En el siglo XII y XIII el arte gótico de los godos con el arco ojival
que permitía cubrir de vidrieras las paredes en las iglesias como constructores
de la Gran Obra de Dios al poner la piedra de fundación y la última como el
alfa y el omega de la catedral, la más famosa la de Notre Dame. Los
"albañiles libres" se trasladaban de un lugar a otro para cumplir los
encargos de la orden benedictina. Instituidos en logias como los gremios de
artes y oficios que transmitían sus secretos mediante jerarquías de aprendiz
(13 o 14 años), compañero (19 y 20 años) y maestro para cumplir sus deberes
ante Dios ("cargas"), al que emulaban al construir sus obras en la
tierra. La obediencia al rey y a la Iglesia como representantes del poder
divino en la tierra, al maestro masón para no traicionar sus secretos y sus
obligaciones morales y éticas: "Cada cantero tenían una marca personal que
grababa en los bloques tallados, marcas que aún podemos ver en muchas de las
catedrales antiguas. Estas marcas eran figuras estilizadas de un instrumento de
trabajo, como el martillo o el compás, o una letra del alfabeto. El caso es que
estos canteros y constructores mantenían bien ocultos sus secretos en el arte
de construir, y formaban asociaciones libres que se desplazaban a otro lugar
cuando terminaba su obra. Sobre el origen de la palabra francmasón se argumenta
que la piedra dócil al cincel del escultor se denominaba en Inglaterra "free
stone", expresión que en Francia se convirtió en "pierre
franc". Los que trabajaban esta piedra se llamaban "free
masón" en Inglaterra, y en Francia "franc
maçon", que más tarde se convirtió en francmasón, miembro de la
masonería, institución especulativa que asumió los signos externos de los
constructores de catedrales. En 1268 vemos que las reglamentaciones francesas
para la edificación de catedrales eran redactadas después de consultar a los
gremios de artesanos, haciendo referencia a los masones y estableciendo que los
"albañiles (maçon en francés), los fabricantes de morteros y
los yeseros pueden tener tantos asistentes y criados como les plazca, siempre
que no les enseñen nada de su oficio" (Santiago; Río, p. 52). Los maçones construyeron
bajo la Orden de San Benito la escuela de medicina en Salerno, dos siglos
después reconocida como Studium generale y sus títulos válidos
en todas partes (Universidad). En 1088 la Universidad de Bolonia reconocida
como la más antigua del mundo y modelo de la Universidad de Oxford en 1096, la
Universidad de Cambridge en 1209, la Universidad de la Sorbona en 1150, la
Universidad de Salamanca en 1230, la Universidad de Carolina en 1348, la
Universidad de Viena en 1365, la Universidad de Heidelberg en 1386 y la
Universidad de Colonia en 1388: "Y un hecho determinante fue que en
Bolonia, en la segunda mitad del siglo XI, empezó la enseñanza del derecho
romano, por obra de Pepone… He aquí tres enseñanzas bien distintas: artes
liberales, medicina y jurisprudencia (esta última, que en un primer momento
concernía sólo al derecho romano o civil, después de que Graciano, en el 1140,
recopiló en su Decretum las leyes eclesiásticas, comprendió
también el derecho canónico; por esto se podía obtener el grado de doctor en
uno u otro derecho, utriusque iuris)… Diversa y compleja es la
historia de los orígenes de cada universidad (se llegará a cerca de ochenta a
finales de la Edad Media). El poder papal o imperial (o regio), que al
principio interviene en su reglamentación, decide que se establezcan con
fundaciones propias en Salamanca, Roma, Nápoles, Viena, Praga, Cracovia, etc.
Pero parece ser que su origen hay que buscarlo en la confluencia espontánea de
clérigos de distinta procedencia para escuchar las lecciones de un famoso
hombre docto. Se produjo entonces el característico fenómeno de los clérigos
vagos (clerici vagantes), obstaculizado primeramente por la iglesia,
sobre todo cuando dejaban sus monasterios o colegios canónicos sin permiso de
sus superiores, pero permitido y protegido después, como ya hemos visto, por
Honorio III, con la bula Super specula, que les conservaba los
beneficios durante cinco años" (Manacorda, pp. 228, 230). En la Edad Media
el lugar de reclutamiento de los niños en las parroquias y en las escuelas del
clero secular donde el obispo era el maestro y en la parroquia el párroco,
delegada a un scholasticus o magischola que
asumió funciones más elevadas y dejó la función de enseñar a un sustituto.
El magischola adopta la costumbre de vender la licentia
docendi para enseñar y quien la obtenía de hacerse pagar por sus
enseñanzas, los inicios medievales de la escuela privada. Dos actos de simonía,
la ciencia era un don de Dios que no se podía vender porque la educación
cristiana era para todos. Los maestros libres clérigos y laicos que habían
obtenido su licentia docendi bajo tutela jurídica de la
Iglesia y el Imperio, eran herederos giróvagos criticados por
San Benito porque se dedicaban a especular en lugar de estudiar. Los clérigos
vagos o goliardos enseñaban las artes liberales del trivium y
el quadrivium fuera de las escuelas episcopales para evitar la
competencia directa en Italia y Alemania, la cuna de las Universidades. Los
clérigos vagos constituyeron asociaciones a semejanza de los gremios de
constructores y artesanos, las societates scholarium jurídicamente
reconocidas por los scholares que se organizaban para la
defensa de sus miembros, los primeros sindicatos magisteriales que tutelaban
los intereses comunes de los doctos y las ciudades anfitrionas. En 1158
Federico I Barbarroja apoyó a los vagantes goliardos con privilegios por su
compromiso cultural, los quita de la jurisdicción del magistrado local para
ponerlos en la del obispo. En 1163 el concilio de Tours imponía que nadie que
hubiera hecho los votos pudiera salir a enseñar ciencias naturales y mundanas.
La Iglesia conservó la supervisión sobre la licentia docendi previo
examen de los títulos de estudio en una ceremonia interna y pública. Las Decretales de
la Iglesia sancionaban a los clérigos que se hicieran goliardos y abandonaran
sus sedes con la pérdida de privilegios sacerdotales. En 1179 el Concilio
lateranense de Alejandro III establece que toda Iglesia debía proveer
beneficios a un maestro que enseñara gratis a los clérigos y otros pobres, y
que no se exigiera ningún pago por la licencia de enseñar porque quien la vende
impide el progreso de la Iglesia. Llegan nuevos privilegios académicos con las
cartas de Felipe Augusto en 1200 y 1210. En 1215 IV Concilio de Letrán,
Inocencio III aprueba la creación de los dominicos y los franciscanos que
dominaron la Universidad en el siglo XIII y supervisaron los aspectos de la
vida judía en los países latinos. En 1219 Inocencio III agrega la teología a
las artes liberales, la medicina y la jurisprudencia. Honorio III en la
bula Super specula, conserva los beneficios durante cinco años
a los maestros de teología que abandonaban un monasterio para que
perfeccionaran su enseñanza. Las siete partidas de Alfonso X el Sabio
(1251-1284) establecen que el estudio es un ayuntamiento de maestros y
escolares con entendimiento para aprender un estudio general de los maestros de
las artes, la gramática, la lógica, la retórica, la aritmética, la geometría,
la música y la astronomía. En
el siglo XIII los goliardos no eran bienvenidos en las ciudades por su falta de vocación para la
vida ascética y la enseñanza. Abundaban historias de clérigos vagos y
estudiantes laicos que mendigaban, cantaban salmos en prostíbulos y jugaban a
los dados con las meretrices. Los Hermanos del Espíritu Libre de Alejandría, Austria,
Bohemia y Alemania son el origen de las logias
di piacere, enseñaban que las mujeres habían sido hechas para el disfrute
de los hermanos, que habían descubierto la forma como Adán y Eva hacían el amor
y que podían recuperar su virginidad si se acostaban con ellos. El Códex Buranus del siglo XII-XIII,
descubierto por el filólogo Johann Andres Schmeller en el siglo XIX en el
monasterio benedictino de Benediktbeuern; refleja una vida de insatisfacción
monacal, el deseo de mujeres, vino y la búsqueda desesperada de dinero para
escapar de la pobreza. Los cantos hacen apología del goce de vivir y los
placeres terrenales, el amor carnal, el juego y el vino, y satiriza los
estamentos sociales, eclesiásticos y la Corona.
Ya que en todo el universo se está cantando: ¡Ite!, trotan los curas, corren los monjes, pronto la Biblia dejan los diáconos, para seguir nuestra secta que es la salvación de la vida.
Nuestra secta acoge a honestos y bribones, gordos y macilentos, fuertes y débiles, a los que gozan de juventud, o languidecen por la vejez, fríos y ardientes en la ebriedad del amor.
Belicosos y plácidos, frenéticos y calmados, bohemios y teutones, romanos y eslavos, los de mediana estatura, gigantes y enanos, los modestos y aun aquellos presuntuosos y vanos.
Nuestra orden prohíbe levantarse pronto de la cama; y apenas levantados vamos a un lugar fresco; allá nos hacemos llevar el vino y las gallinas, y sólo tememos del juego la ruina.
Nuestra orden prohíbe tener más de un vestido; llevar una túnica es apenas permitido; para atender a los dados quítese pronto la capa y también el cinturón para disponerse a jugar.
Por lo dicho por encima se entienda lo que hay debajo: no use calzoncillos quien lleva camisa; quien tenga sandalias, renuncie a las botas, si nuestra excomunión no quiere recibir.
Carmina Burana, Gaudeamus.
Al florecer abriles en mis días, cuanto hacer anhelaba, al punto hacía, y sólo veneré, sin obstrucciones, lujuria tan leal me parecía, fuera aquí o acullá las intenciones de mi cuerpo lascivo y sus pasiones. Más rendir al otoño vasallaje debe la vida, en su libertinaje. En el tiempo caduco hacia el olvido, sin fasto o pensamiento que agasaje, todo es prohibir y, todo destruido, despojar del placer de lo querido.
Carmina Burana, El
Otoño de la vida.
Oh, fortuna, cual la luna, que es sobre todo mudable, siempre creces o decreces; esta vida detestable hoy es dura, después cura la mente, diestra en el juego; la indigencia, la potencia, se funden cual hielo luego.
Carmina Burana, Fortuna, emperatriz del mundo.
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L´loggia
di piacere & L´orgia spirituale.
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El 20 de mayo de 1521 la batalla de Pamplona en el segundo intento de recuperar Navarra por Enrique II con apoyo franco, en la tropa atacante participaban Miguel y Juan de Xavier, los hermanos de Francisco Javier, uno de los fundadores de la Compañía de Jesús. En la defensa de la ciudad Ignacio López de Loyola. En su autobiografía recopilada por P. Luis Gonçalvez da Cámara entre 1553 y 1555, explica que hasta los 26 años era un hombre "dado a las vanidades del mundo y el ejercicio de armas con grande y vano deseo de ganar honra". Defendía la fortaleza contra los francos cuando una bombarda pasa entre ambas piernas, la izquierda queda herida y la derecha destrozada. Los franceses toman la fortaleza y atienden a Loyola, quien estuvo entre doce y quince días en Pamplona, llevado en litera a su tierra. Los médicos aconsejaron que debían acomodar de nuevo los huesos porque habían sido mal puestos la primera vez, después de la operación se pone mal, deja de comer y da indicios de muerte. En el día de San Juan los médicos pensaban que iba a morir, le recomendaron la confesión y que si a media noche no había mejoría, "podía darse por muerto". En 1522 Ignacio de Loyola llegó a la abadía de Monserrat montado en una mula y vestido de caballero, el 24 de marzo se confesó por escrito con el benedictino Jean de Chanon. El 25 de marzo se quitó sus armas y capa ante la Virgen negra (la Moreneta, patrona de Cataluña). Corrado Augias en Los secretos del Vaticano. Luces y sombras de la historia de la Iglesia (2011), comenta que con su bastón de peregrino, vestido con una modesta túnica y calzado con sandalias, viajó por Europa, llegó a Jerusalén y regresó a España para iniciar su actividad teológica. En febrero de 1528, en la Sorbona de París conoce a sus compañeros. El 15 de agosto de 1534, el sacerdote francés Pedro Fabro, los españoles Ignacio de Loyola, Francisco Javier, Nicolás Bobadilla, Alfonso Salmerón, Diego Laínez y el portugués Simón Rodríguez salen del barrio latino de París, suben Montmartre y llegan a la Iglesia de St Pierre. Hacen votos de pobreza y castidad con el compromiso de peregrinar a Tierra Santa y nace la Compañía de Jesús. En 1537 los sietes integrantes piden al papa la aprobación de la Orden y son ordenados sacerdotes en Venecia. En 1540 la Compañía obtiene el reconocimiento oficial en la Bula Regimene de Pablo III, Ignacio de Loyola el primer superior de la Orden y su primera misión fue la catequesis de las escuelas de Roma: "Hace más de veinte años, de los órganos de gobierno del Gran Oriente de Cataluña, partió la idea de crear un centro de estudios jesuíticos, para, de alguna manera, estar a su misma altura y contrarrestar, por lo menos en el conocimiento, los centros de estudios masónicos de la Compañía de Jesús… Nos cuentan que la investigación de la estancia de Ignacio de Loyola en Montserrat, a cuya abadía llegó montado en una mula y vestido de caballero con su correspondiente espada, fue sorprendente, pues nos lleva, como veremos, a la conclusión de que la Compañía de Jesús es hija de los benedictinos de Montserrat… Ignacio de Loyola se confesó por escrito el 24 de marzo de 1522 con el benedictino Jean de Chanon o Chanones… el archivo secreto del centro de estudios jesuíticos que se creó en su día, actualmente está desaparecido, sin embargo, hemos podido saber por masones que formaron parte de dicho grupo de trabajo, que había informes sobre la personalidad real de Ignacio de Loyola… Así vemos que los famosos "Ejercicios" fueron copiados del libro Exercitario de la vida spiritual, del abad García de Cisneros, sobrino del Cardenal Cisneros, y seguidor de la "devotio moderna", inspirada por el flamenco Ruysbrolck" (Santiago; Río, pp. 86, 87). Los alumbrados de Toledo (1510-1530), Extremadura (1570-1582), la Alta Andalucía (1575) y Sevilla (1622-1630). Los de Toledo tuvieron de preceptores a Pedro Ruiz de Alcaraz e Isabel de la Cruz, la doctrina era el amor de Dios a través de la oración mental, tenían reuniones secretas donde se interpretaba la Biblia con el rechazo de las obras exteriores, de la autoridad eclesiástica, del estado del matrimonio, de los santos y de todo aquello que estorbara el amor de Dios en el hombre, entendido como vaciamiento. Los de Extremadura a Hernández Álvarez y Cristóbal Chamizo. El amor de Dios a través de la oración mental garantizaba la impecabilidad, hacían proselitismo, interpretaban la Biblia, rechazaban las instituciones religiosas, practicaban la comunión, tenían visiones, raptos, revelaciones, ardores, temblores y desmayos, y justificaban la santidad de los tactos deshonestos y los accesos carnales. Eran lujuriosos, profanaban lugares sacros y reclutaban entre los franciscanos, las monjas y las doncellas. Chamizo tuvo un proceso por tener acceso carnal con 34 mujeres, de las cuales 23 eran doncellas. Álvarez confesó haber cometido actos deshonestos en un estado de gracia o impecabilidad: "que hace Dios unión espiritual sobre sus siervas mediante tactos y tocamientos deshonestos. Los cuales son efectos del espíritu en la materia; que como el espíritu por si no puede obrar, causa aquellos efectos en la materia, y que los dichos tocamientos con las mujeres son obras de Dios, y que abrazándolas se les comunica el espíritu y se les quedaba pegado por sola aquella participación" (Huerga, p. 207). Los de la Alta Andalucía de Baeza a Pedro de Ojeda, Francisco Hernández, Diego Pérez de Valdivia y Remando de Herrera. Los de la Alta Andalucía de Jaén a Gaspar Lucas y la beata María Romera. Los de Sevilla a Juan de Villalpando y la beata Catalina de Jesús. Todos rechazaban las instituciones religiosas, justificaban la oración mental, y salvo los de Toledo, la impecabilidad y la santidad de los tactos deshonestos y los accesos carnales. Para los alumbrados la sensualidad del siglo XVI era la vía para alcanzar la comunicación con Dios y la santidad. En México apareció en la Ciudad de México, Puebla de los Ángeles, México, Querétaro, Michoacán, Jalisco, Aguascalientes y Oaxaca. Tres eran monjas, una dominica del convento de Santa Catalina de Siena en Puebla, una capuchina del claustro de San José en Oaxaca, una clarisa del de Santa Clara de Atlixco en Puebla, una novicia del claustro de San Juan de la Penitencia de la Ciudad de México. En la Ciudad de México el laico Juan Núñez de León, el balanzario de la Real Caja en Casa de Moneda, y las beatas Ana de Guillamas o Peralta y Marina de San Miguel que afirmaban que a través del amor de Dios se llegaba a un estado de perfección que podían cometer acciones pecaminosas sin pecar. Juan Núñez de León y su hija espiritual Marina de San Miguel tuvieron una relación de 20 años. A los 47 años la dejó de tocar, escogiendo doncellas púberes. Juan Núñez gustaba de abrazarlas, meterles la lengua y tocarles los pechos y la vagina. En Puebla el confesor Juan Plata y su hija espiritual Agustina de Santa Clara. Juan Plata abrazaba a todas las monjas, tenía tocamientos deshonestos y relaciones sexuales en la azotea: "Hacia 1589, a petición del obispo de la diócesis de Tlaxcala, don Diego Romano, el clérigo toledano, Juan Plata, ocupó el cargo de capellán del monasterio de monjas dominicas de Santa Catalina de Siena. Aparentemente fue en este recinto donde por primera vez Plata introdujo los principales postulados de la doctrina de los alumbrados-dejados españoles, esto es, la práctica de la oración mental, el rechazo de la oración vocal y las obras exteriores, la libre interpretación de la Sagrada Escritura y otros libros devotos, el desestimo del estado religioso, y fundamentalmente, que a través del amor de Dios se llegaba a tal estado de perfección y que se podían cometer acciones pecaminosas sin pecar. Agustina de Santa Clara, natural de Puebla e hija de padres españoles originarios de la región de Extremadura, fue una monja profesa del convento de Santa Catalina de Siena. Agustina ingresó al monasterio a los 18 años y su clausura se debió más a estatus social que a vocación religiosa; sin embargo, cuando sor Agustina padeció un “dolor de costado”, que casi le provocó la muerte, ésta decidió ofrendar su vida al amor de Dios. La muchacha no encontró mejor oportunidad de lograr su cometido que seguir la instrucción de su padre espiritual, el capellán Juan Plata. La santidad que giró en torno a la monja Agustina de Santa Clara y su director espiritual Juan Plata representó el medio ideal para esconder las verdaderas relaciones que hubo entre ambos: ósculos, tactos deshonestos, poluciones en el locutorio, en la reja de la iglesia y en el confesionario, así como relaciones sexuales dos noches en la azotea del convento. Juan Plata reveló -en respuesta a la contestación de su acusación, el 24 de agosto de 1598- que abrazaba a todas las monjas de Santa Catalina, que había besado en la boca a una de ellas, Inés de San Pedro, compañera de Agustina, y por último, que besaba en la boca y en el rostro a Agustina de Santa Clara… Así, la relación que hubo entre ambos, según sus propias palabras, sólo fue una "comunicación de espíritu" (Rodríguez Delgado, pp. 90, 91). Ignacio de Loyola enfrentó siete procesos o inicios de procesos antes de ser el primer superior de la Orden Jesuita. En España enfrentó cuatro, acusado de alumbradismo, de pretender enseñar profundidades espirituales a las mujeres sin estudios, de buscar intencionadamente el secretismo: la insistencia en la oración mental, en la consolación interior, en la comunión frecuente, y un magisterio fundado en la experiencia religiosa personal de iluminación interior. Loyola despertaba las sospechas porque su magisterio no estaba basado en el saber teológico y escolástico, la razón de su éxito en el público femenino. En Salamanca fue detenido en 1527 y puesto en una lista por sus ideas teológicas que recordaban el movimiento alumbrado. Los dominicos lo pusieron en libertad sin más cargos, pero le prohibieron predicar y enseñar con la advertencia de que era mejor guardar silencio en lo tocante a ciertos puntos teológicos. En febrero de 1528 el quinto proceso en la Sorbona de París. En 1537 el sexto proceso en Venecia. En 1538 el séptimo proceso en Roma. El recelo hizo que la Compañía adoptará un modo críptico de comunicación: "modo de proceder", "modo de hablar": "El término alumbrado empezó a utilizarse, por el pueblo castellano, a partir del año 1510 para referirse tanto al misticismo ortodoxo como a clérigos y laicos con fama de santidad. Fue a través de las denuncias de testigos y reos (alumbrados de Toledo) que los inquisidores conformaron el corpus doctrinal del alumbradismo, es decir, que con la publicación del Edicto de Toledo de 1525, el vocablo de alumbrado adquirió contenido histórico y doctrinal. De acuerdo con la óptica del Tribunal del Santo Oficio, la cual quedó plasmada en posteriores edictos inquisitoriales, los alumbrados fueron todos aquellos que a través de la práctica de la oración mental llegaban a un éxtasis y mediante éste lograban la comunicación directa con Dios. Una vez que se alcanzaba la unión con el Ser Supremo, el individuo quedaba en un estado de gracia tal que se permitía toda clase de libertades, principalmente en lo que se refiere a conductas de tipo sexual, sin que por el practicante fueran consideradas pecado… Estos sujetos se caracterizaban por su afición a una interpretación de la Sagrada Escritura basada en su inspiración personal; por su rechazo de las obras como instrumento de salvación, así como del estado clerical y del sacramento del matrimonio; por su doctrina de la incapacidad humana para cumplir los mandamientos de Dios a causa de la servidumbre del albedrío; por una práctica no mística de la oración y de comunión con Dios; y finalmente por su afirmación de que el hombre depende totalmente de la misericordia de Dios, lo cual explicaría la designación "dejados", esto es, abandonados al amor de Dios. Esta doctrina en ocasiones es confusa y contradictoria, ya que por un lado creían que suprimiendo el acto sexual se intensificaba la devoción, razón por la cual despreciaban el estado matrimonial, pero por otra parte, les estaba permitido cualquier tipo de deseo libidinoso justificándolo como obra de la virtud" (Rodríguez Delgado, pp. 81, 82).
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Soppressione
della Compagnia di Gesù.
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Todavía no nacía Friedrich Nietzsche ni Michel Foucault cuando los jesuitas ya habían sido acusados de megalomanía (considerarse la única "Compañía de Jesús"), de intentar invertir la tabla axiológica de valores de Occidente ("Superhombre") y ser una Compañía anticristiana ("Anticristo"). Un caballo de Troya dentro de la Iglesia que retaba a las órdenes religiosas, a los reinos católicos y al mismo papa con métodos propios del crimen organizado. Lo grave de las acusaciones es que no sólo venían de los protestantes, las órdenes católicas rivales y las universidades, sino de los mismos jesuitas. El arzobispo de Toledo Martínez Silíceo fue el primero en acusar a la Compañía de convertirse en refugio de judeoconversos: Bobadilla, Nadal, Laínez, Polanco. En 1549 los jesuitas llegaron a la Universidad de Ingolstadt y en 1551 a la Universidad de Viena. En 1560 Flacius Illyricus escribe sobre "la enseñanza pagana de los jesuitas", "una enseñanza absolutamente atea, farisaica, turca". En 1565 Francisco de Borja es el nuevo prepósito y quedan atrás las críticas por el alumbradismo de Loyola, la aceptación de judeoconversos y la educación farisaica por la politización de la Compañía que recurría a todo tipo de métodos sin ningún escrúpulo para ganar poder político. En 1556 estaban en Italia, España, Portugal, Francia, Alemania, Brasil, India y Japón. En 1572 falleció Francisco de Borja y el inquisidor general Diego de Espinosa; un año después Ruy Gómez de Silva y Juana de Austria. El nuevo general, Everardo Mercuriano, elegido frente a la candidatura del español Polanco, causando el rechazo del sector italiano de la Compañía y del papa Gregorio XIII. En 1581 la elección del general Claudio Acquaviva radicalizó la crisis. El choque estalla en el siglo XVI, los jesuitas hispanos Vázquez, Salazar, Osorio, Sánchez, González, Sahelices, Estrada, Alseo, Carrillo y Enríquez exigen una visita o auditoría independiente de la Compañía ante los graves abusos que se producían en su gobierno interno: despotismo, revelación de confesión entre los jesuitas, las acusaciones de unos a otros queriendo ganar méritos entre los superiores, elecciones sin consenso por voluntad de los superiores… La exigencia del nombramiento de un comisario o vicegeneral para España, arropados por el jesuita padre Mariana que criticaba el poder absoluto del general. Acquaviva ante las presiones de Sixto V y Felipe II, ordena la visita de la Compañía a España. Sixto V atendió a tal grado las quejas de los jesuitas hispanos que incluso programó una reforma institucional para cambiar su nombre, por la crítica de la arrogancia de considerarse la única Compañía de Jesús. Reforma bloqueada por la muerte de Sixto V en 1590. En 1593 la Historia ordinis jesuitici atribuida al exjesuita Elías Hasenmüller, acusa a los jesuitas de ser "asesinos por profesión, jabalíes salvajes, ladrones, traidores, serpientes, raza de víboras, más feroces y más peligrosos para los alemanes que los turcos". En 1594 Antoine Arnauld acusa a los jesuitas de las guerras de religión de Francia, en 1572 acusados de la matanza de San Bartolomé, en 1606 de la conspiración de la Pólvora (Guy Fawkes, personaje de Anonymus), en 1666 del gran incendio de Londres. Acusados de los asesinatos e intentos de asesinato de Guillermo de Orange, Enrique III, Enrique IV y Luis XIV de Francia, Isabel I, Jacobo I, Carlos I y Carlos II de Inglaterra. Las teorías conspirativas de la muerte de William Henry Harrison, Zachary Taylor, James A. Garfield, McKinley y Abraham Lincoln. Sin la Compañía de Jesús no se entiende la agenda neoliberal: "Sus antecesores-fundadores resultaron ser los escolásticos de la Universidad de Salamanca durante el Siglo de Oro. Según su indiscutible promotor y heredero de esta secta económica, el castellano Jesús Huerta de Soto, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid, aquellos olvidados maestros terminaron por ser asumidos como la fuente original del pensamiento austríaco hasta el punto de que, cuando Friedrich A. Hayeck recibió el Premio Nobel de Economía en 1974, marcando la defunción del keynesianismo y el inicio de la era neoliberal, mencionó como ilustres antecesores a Luis de Molina, Juan de Salas y Juan de Lugo, tres funcionarios del católico claustro de Salamanca. A decir del austriacista más connotado de EEUU, Murray Rothbard, hispanista por más señas, "los principios básicos del mercado competitivo fueron desarrollados por los escolásticos españoles del siglo XVI y el liberalismo económico fue diseñado, más que por los calvinistas escoceses, por los jesuitas españoles", que, según cuenta Huerta de Soto en la Austrian Economic Newsletter; eran profesores y catedráticos de Teología y Moral en la Universidad de Salamanca… Casi todos estos escolásticos eran o dominicos o jesuitas, y su concepción subjetiva y dinámica de la economía sería retomada por Carl Menger más de trescientos años después" (Malló, pp. 66, 67). En 1613 La monita secreta, atribuida al exjesuita polaco Hieronymus Zahorowski. En 1760 traducida al italiano con el título I lupi smascherati que institucionaliza la imagen de los jesuitas como lobos disfrazados de corderos, un núcleo de poder absoluto al margen del Estado, con su capacidad de simulación que ponía en peligro los cimientos del Estado. En 1770 El Reino jesuita del Paraguay de Bernardo Ibáñez consolida la imagen de los jesuitas como conspiradores que usaban el Paraguay como el gran "reino invisible y secretísimo" desde el que los jesuitas atacaban España. La monita secreta la inspiración del Judío Errante de Eugenio Sue en 1845, obra que denunciaba una conspiración internacional jesuita, a juzgar por los relatos y las quejas de los mismos jesuitas, parece que la Compañía también fue víctima de un golpe interno: "Las célebres Monita Secreta, atribuidas a la pluma del jesuita renegado Hieronymus Zahorowski, se publicaron por primera vez en Cracovia en 1613 y hacia 1700 habían conocido ya veintidós ediciones en siete idiomas diferentes. Estas "instrucciones secretas" detallan las normas a seguir para socavar la civilización europea, que es el supuesto objetivo de los jesuitas. Se supo así, por ejemplo, que cuando fallecía un rico, la viuda empezaba a ser solicitada por jesuitas jóvenes y de animada conversación para disuadirla de volver a contraer matrimonio y aconsejarla que abrazara una vida de aislamiento y oración y abandonase en manos de la compañía las tediosas tareas de la administración de la herencia. Pero había algo aún más importante que las riquezas, la habilidad para "revestir tantas formas como Proteo y tantos nombres como un galés". Nunca se sabía qué aliados podía uno necesitar en un momento dado, así que era preciso mantenerse dispuestos a serlo todo para todos… "El jesuitismo es una región del secreto y del disfraz, donde el sol no alumbra", revelaba un comentarista de la época posterior. "Caminar furtivamente, susurrar al oído, moverse subterráneamente como los topos, reptar de un lado a otro como las serpientes por los recovecos de la sociedad, revestirse del disfraz más conveniente para los fines perseguidos", esas eran las habilidades en que destacaba el talento del sacerdote jesuita" (Wright, pp. 163, 164). La Compañía de Jesús era acusada de ser el "rey de los gitanos" por los innumerables disfraces y las formas adquiridas para cumplir sus misiones. A los jesuitas se les trataba con recelo, adoptaban nombres fingidos y vestían indumentaria nada clerical: Michael Walpone se hizo pasar por un criado español cuando llegó a la Inglaterra isabelina; Mateo Ricci vestía de erudito confuciano y a rape en la China de 1578; Alessandro Valignano instruía a sus misioneros en Japón para que adoptaran las costumbres locales; Abraham de Georgis fue a Egipto disfrazado de mercader armenio en 1595; Alejandro de Rodas andaba en coleta y zapatillas de raso en la Vietnam de 1627; Sebastián Vieira hizo el viaje de Manila a Japón como marinero chino en 1632; Miguel Agustin Pro se hizo pasar por mecánico, chofer, mendigo y barrendero en el México anticlerical de 1920. En 1759 Carlos Alberto de Moura Ribeiro Zeron en Ligne de foi: la Compagnie de Jésus et l´esclavage dans le processus de formation de la société coloniale en Amerique portugaise, explica que hasta su expulsión de Brasil en 1759, los jesuitas utilizaban mano de obra indígena y africana y practicaban el comercio de esclavos desde Angola. La Compañía expulsada por el marqués de Pombal de Portugal en 1759, Luis XV de Francia en 1764, Carlos III de España en 1767. Los reyes católicos obligaron a Clemente XIV a extinguirla en 1773. El texto clave y con mayor reputación para conocer su historia es el Retrato de los jesuitas, formado al natural, por los más sabios, y más ilustres católicos. Juicio hecho de los jesuitas. Autorizado con auténticos e innegables testimonios, por los mayores y más esclarecidos hombres de la iglesia y del estado: desde el año de 1540, en fue su fundación, hasta el de 1650" (1768). Documento donde los reinos, las universidades y las órdenes religiosas compilan las quejas y evidencias ante el papa: destruir y cooptar las universidades del estado; invadir los reinos con sus escuelas privadas para educar a la nobleza del lugar y tomar el poder político por asalto; el desplazamiento de las congregaciones religiosas; el robo de iglesias, conventos y limosnas; el comercio de esclavos, negocios ilegales, usura, repartimiento de indios; hacer caso omiso de las encíclicas papales y hacer las suyas; usar la reserva mental para ocultar la verdad; hacer sincretismo e inventar nuevas religiones; aprobar confesiones distintas para los reyes sometidos en Asia: en público budistas, taoístas y sintoístas, en privado católicos de versión jesuita. Otras acusaciones eran minar el poder papal con sus iglesias nacionales locales, desarrollar estados dentro del estado, cooptar a los reyes con sus confesores religiosos para intervenir en asuntos de estado o declararles la guerra, educar a los ricos, lucrar con los desvalidos y abandonarlos, tener relaciones en los confesiones, ser visitantes asiduos de los burdeles y la pederastia en las escuelas: "Sería absurdo pretender que nunca hubo jesuita, franciscano ni dominico que hiciesen lo que no debían, y que nunca se inflamaron con ningún adolescente o ninguna mujer… En cuanto a la relación de los jesuitas con la juventud de la Europa católica, sus enemigos muchas veces se limitaban a la acusación de crueldad. Se afirmaba que cobraban las subvenciones municipales por hacerse cargo de los niños huérfanos y abandonados, y luego los mataban de abandono. Entregados a nodrizas degeneradas, infectadas del mal venéreo, los bebés "mamaban veneno en vez de leche". Sin embargo, los propagandistas volvían una y otra vez sobre los abusos sexuales. Podían envanecerse los jesuitas de sus instituciones caritativas y educativas, de sus brillantes alumnos, de su pedagogía innovadora, pero un autor fantasioso y ansioso por "arrancar de los hombres de la Compañía la larga sotana de la hipocresía", lanzaba la advertencia de que tales adulaciones ocultaban el hecho de que en aquellas mismas instituciones revivían "los habitantes de Gomorra" y se "repetían los atroces actos de Sodoma", como lo demostraban "el afeminamiento de los modales, los tocamientos y abrazos impúdicos, las poluciones e impurezas tan comunes entre los estudiantes más jóvenes". Por no hablar de los muchachos de más edad "que no tienen dificultad de persuadir a sus pupilos para que consientan tocamientos corporales, y fomentan en ellos la mayor inclinación a cometer esa obscenidad abominable que repugna a la natura". Lo cual no era de extrañar, visto el ejemplo que recibían, como el del maestro aficionado a besar ardientemente y rodear con brazos y rodillas al joven elegido de entre sus alumnos" (Wright, pp. 156, 157).
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L´distruzione
strategica della Università pubblica.
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En 1550 llegan a México fray Pedro
de la Peña, fray Pedro de Pravia y fray Diego de Osorio y en 1551 fray
Bartolomé de Ledesma de la Orden de los Predicadores o "dominicos"
para impartir cátedra en la Real y Pontificia Universidad de México, creada por
cédula real del emperador Carlos V, firmado en su nombre por Felipe II en la
ciudad de Toro el 21 de septiembre de 1551, inaugurada el 25 de enero de 1553
("UNAM"). La empresa educativa fue petición de los hijos de los
conquistadores que exigieron al rey la fundación de una Universidad para su
descendencia. La cédula de la erección era incluyente para que estudiaran los
hijos de los conquistadores y los naturales de la tierra, pero en la práctica
no ocurrió porque los naturales estaban excluidos de las órdenes sacerdotales
desde el primer Concilio mexicano convocado por el primer arzobispo Montúfar.
Hasta finales del siglo XVII, dos cédulas promovieron la entrada a la
Universidad, la primera para que accedieran al estado eclesiástico y la segunda
a los cargos civiles: "Sin embargo, lo que impulsó el nivel académico de
los estudios dominicos novohispanos fue la llegada a México, en 1550, de fray
Pedro de la Peña, fray Pedro de Pravia y fray Diego de Osorio y en 1551, de
fray Bartolomé de Ledesma. Todos ellos eran religiosos del convento de San
Esteban en Salamanca, formados por maestros de la talla de fray Francisco de
Vitoria, fray Domingo de Soto y fray Domingo de Báñez. El traslado de los
cuatro frailes a la Nueva España se debió a las peticiones que la provincia de
México hizo al rey y al maestro de la Orden para enviar lectores a la Real
Universidad, que en 1550 estaba a punto de abrirse. Esta tercera etapa se
desarrolló entre las aulas de la Universidad y de los conventos de México,
Oaxaca y Puebla" (Martín Torres, p. 17). La situación cambió a mediados
del siglo XVII en las Constituciones de Palafox, que establecían en el estatuto
246 que los estudiantes que quisieran ingresar a la Universidad, tenían que
someterse a un estatuto de limpieza de sangre como indígenas puros, que significaba
que no debían ser mezcla de negros, mulatos o chinos, que tenían estatus
inferior a los naturales por derecho propio: Puebla, Azcapotzalco, Iztapalapa,
Michoacán, Oaxaca, Querétaro, Guanajuato, San Miguel el Grande, Irapuato. La
Universidad Nacional Autónoma de México el 28 de junio de 2019 presentó un logo
arcoíris en sus redes sociales por el 32º festival de la diversidad sexual, un
día antes de la 41ª marcha del orgullo LGBTTTIQA en Paseo de la Reforma,
cooptada por las empresas y las televisoras. El papel histórico de la UNAM era
revisar el estado de arte en la materia con los marcos interpretativos de la
realidad para abordarlo desde la inter, multi y transdisciplinariedad en foros
o debates académicos que ahora llevan las televisoras comerciales. En agosto la
jefa de gobierno de la CDMX Claudia Sheinbaum señaló que no se abrirían
carpetas de investigación a las mujeres que participaron en los destrozos de la
marcha feminista del 16 de agosto con el discurso de "no criminalizar la
protesta social". El 7 de noviembre una marcha feminista que hacía
destrozos en la UNAM fue expulsada por los alumnos de la Facultad de
Ingeniería. El jueves 14 de noviembre un grupo anarquista perpetuó un nuevo
ataque con la destrucción de parte del mobiliario y la librería Enrique
González. Todas las banderas que rechazan la Iglesia, la familia, la propiedad
y la reproducción por encadenar la libertad espiritual, y la promoción de la
abstención voluntaria de la leche, la carne, los huevos, el vino y el sexo para
alcanzar la pureza, descienden de las sectas heterodoxas medievales de corte
grecobudista. El liberalismo, el anarquismo, el socialismo, el feminismo y el
LGBTTTIQA no son banderas laicas, tienen sus teologías, teleologías, metafísicas
y conceptos de salvación; son banderas apocalípticas que hacen del Estado y la
Escuela su Iglesia. Pero ninguna de estas banderas rechaza la propiedad privada
o el Estado como sí lo hacían los herejes medievales al negar la redención
terrenal en un mundo material. El feminista necesita del Estado porque intenta
cerrar las brechas de desigualdad al afirmar la materia con la utopía del
progreso. En teoría una bandera pacífica como los maniqueos y los primeros
cátaros que rechazaban la violencia por la tesis de que el "mal jamás
puede ser erradicado". El activismo feminista dejó de ser pacífico porque
cree que el mal puede ser erradicado con el uso de la fuerza o la violencia, un
brote de milenarismo apocalíptico secundado por un sector de las teóricas. Los
grupos feministas han mutado en anarquistas ("Espíritu Libre") que
cubren su identidad para vandalizar, actos que jamás vamos a ver en las universidades
privadas, las principales beneficiarias de la destrucción de la universidad
pública. Hay dos referentes históricos, el ataque de los cristianos a la
Biblioteca de Alejandría en el año 391 durante un pogromo anti
pagano instigado por el patriarca Teófilo. En el siglo XVI los jesuitas
vandalizaban las universidades públicas franciscanas y dominicas al mismo tiempo
que extendían una red de universidades privadas. El conflicto magisterial del
2006 en Oaxaca vio el secuestro de la educación pública y el aumento de la
educación privada en uno de los estados más pobres del sureste. Sin importar lo
que diga el discurso político, la educación pública pierde (esfera pública) y
la educación privada gana (esfera privada). Los hijos de los revolucionarios
estudian en escuelas privadas porque la destrucción de la educación pública es
su negocio. Nadie entra a una universidad para ser el próximo líder de un
movimiento político. Los intereses políticos son extrauniversitarios
("Teología de la Liberación"), pero pueden imponerse mediante
departamentos: "decolonial, epistemologías del sur, comunalidad"
(para no decir guerrilla urbana o rural).
"Vendrá tiempo en que la Compañía se ocupará toda en las Ciencias Humanas, pero sin aplicación alguna a la virtud. La ambición dominará en ella, la soberbia y orgullo entrarán en ella a rienda suelta, no habrá alguno que la pueda reprimir. Si a los ojos de nuestros hermanos se volvieren hacia las riquezas; si hiciesen demasiado aprecio de estos adelantamientos, se verán en abundancia de bienes del mundo, pero con entera privación de las virtudes sólidas y bienes espirituales. Este es el primer aviso que tengo que darles…".
Francisco de Borja en
1560, Retrato de los jesuitas, 21-22.
"Son tanto más de temer, y acusar, cuando que debajo de una capa tan santa, tan pía, y tan devota, y debajo de este nombre santo de Jesús, nos han dividido y llenado de facciones y partidos… con la parcialidad y cisma que han esparcido en nuestra república, nos instruyen y nos enseñan a tenernos odio mortal unos con otros… ya que las obras de estos hombres muestran lo que son; ya que los escándalos que ellos han cometido son tan notorios a todos, juzguemos que estamos obligados en conciencia, haciendo lo que es debido a nuestro cargo. El primero es: que aquellos que se intitulan falsamente de la Compañía de Jesús, y por está única causa tienen el vulgar sobrenombre de jesuitas, hayan de salir del reino de Francia quince días después de intimado el auto acordado, que fuere proferido como cismáticos, sediciosos, perturbadores del sosiego público, corruptores y engañadores de la juventud; y se debe prohibir a todos los vasallos del rey, que se envíen a sus hijos fuera del reino para ser educados por los dichos jesuitas".
Procurador General de
Francia en 1595, Retrato de los jesuitas, 58-59.
"Hace algún tiempo que habiéndose introducido los jesuitas artificiosamente en las mejores ciudades del reino, se han entrometido a enseñar a la juventud; y con este pretexto han ganado para su compañía bienes y rentas inmensas e increíbles con la afluencia de los estudiantes, de lo que procede la segunda causa de la ruina y desolación de las Universidades… Hoy no sólo posee está nueva compañía (aunque sospechosa para los más prudentes y buenos franceses) más caudales y rentas que todas las dichas Universidades, sino que también atrae así como todo género de artificios, copioso número de estudiantes, con ruina de las Universidades y perjuicio notable del estado".
Universidad de París en
1614, Retrato de los jesuitas, 132.
"Estos hombres ardientes y tumultuosos, como no pueden reprimir su codicia, quieren absolutamente levantar una escuela en Cracovia. No habiendo podido conseguir esto del rey y del senado, limitaron estos hombres artificiosos sus demandas sólo a dos puntos en apariencia. El primero es que les fuera permitido, así como a los demás religiosos, enseñar a la juventud en sus casas. El segundo es, que los admitiesen en hacer un cuerpo con la Universidad. Esto era una exquisita astucia, y singular industria inventada para ruina de la Universidad... Porque por una parte bien es cierto, que mientras ellos puedan alcanzar la menor licencia para enseñar, no dejaran licencia alguna para derramarse como un torrente, que se precipita a destruirlo todo; y lo harían de suerte, por medio de sus solicitaciones, de sus emisarios y de sus amigos, que después de haber llenado toda Polonia con sus escuelas, podrían conseguir fácilmente el destruir la antigua Universidad, para hacerse absolutos señores de la ciudad capital. Esto es lo que se vio en Francia: donde aunque no los recibieron, sino estrechándolos cuando fue posible, con las más fuertes prisiones; sin embargo, ellos supieron soltarse con sus diabólicos artificios. Por otra parte, era más peligroso incorporarlos a la Universidad, porque no dejarían de destruir enteramente su concordia, y después de haberla destruido, hacerse dueños de ella".
Universidad de Cracovia
en 1622, Retrato de los jesuitas, 140-141.
"Estos hombres, de quienes nos quejamos, son reos de una avaricia manifiesta; son insaciables, ponen a todo el mundo en contribución, roban hasta el último real; son ambiciosos, arrogantes, aduladores de los príncipes, cobardes, cortesanos, que solicitan continuamente meterse en negocios del mundo; son engañadores, mentirosos, corruptores de la verdad, enemigos, y acusadores de la virtud, adversarios de la vida religiosa, esclavos de los placeres del mundo, calumniadores de la piedad, disfrazados siempre con la máscara de hipocresía. Lobos vestidos con pieles de oveja, amigos de nuevas opiniones, llenos de desprecio de los derechos sagrados... perturbadores de la paz pública, llenos de artificios, verdaderas serpientes y detestables espíritus que todo el mundo debía evitar".
Todas las Universidades
de España en 1626, Retrato de los jesuitas, 178.
"La vanidad o el interés los movió muchas veces a hacerse cabezas de motines y de partidos enredadores. Habéis hecho más usurpaciones que conquistas… Vuestra doctrina del parricidio ha sido muchas veces funesta a las sagradas personas de nuestros reyes: y aún manifestáis con exceso la afectación de una criminal soberanía. No hablo de los atentados que cometiste en Inglaterra, en Polonia, en Alemania, en las Tierras de la República de Venecia, en la China, en el Canadá. Serían necesarios grandes volúmenes si hubiéramos de referir lo que intentáis en Francia… Fuiste los más insignes incendiarios de la Liga…".
Universidad de París en 1644, Retrato de los jesuitas, 221-225.
Kaewalin Winotaphan. ICE SIAM DREAM © |
Spiritual Fornication
Il gesuita lussurioso.
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Spiritual Fornication de 1731, conocida en castellano como El
jesuita lujurioso, obra del poeta inglés Jeremy Jingle, un burlesque
poem que reconstruye el caso de "la señorita Cadière y el padre
Girard". El clérigo aficionado a "besar a todas las mujeres de la
parroquia" y que "sin pérdida de tiempo les hacía la barriga".
Basado en el proceso de Marie-Catherine Cadière contra su confesor, el jesuita
Jean-Baptiste Girard. La joven acusó a su consejero espiritual de brujería, de
inducirla a hacer actos indecentes y de dejarla embarazada. El jesuita en su
defensa argumentó que la mujer era histérica, padecía de convulsiones, que se
creía santa por tener el cuerpo llagado, y que incluso había llegado a manchar
sus manos de sangre menstrual. El caso fue tan mediático que incluso fue
debatido en el Parlamento de Aix (Provence) en 1731. En la primera sentencia la
mujer condenada a muerte, después de un mes tras la protesta general, declarada
inocente y Girard trasladado. El caso se politizó, los jesuitas eran
considerados un cuerpo extranjero que intentaba introducirse en la Corona de
Francia y los enemigos lo aprovecharon para convertir a Catherine en una
víctima de un depravado lujurioso.
Clérigos, frailes o jesuitas todos son farsantes piadosos, falsos y embusteros religiosos que sirviéndose de su oficio seducen las incautas jovencitas.
Un jesuita es un hombre astuto y cuando quiere confesar una doncella primero la absuelve, y luego la aprieta a fin de ponerla en el apuro. Finalmente la besa y no descuida la ocasión de multiplicar la transgresión.
Amancebadas tiene a más de veinte, con todas ellas cumple religiosamente. Para él, adulterio y fornicación no son más que una mera diversión.
Pareciéndoles pocas las que tiene ahora su antojo algo nuevo quiere: una pollita blanca, lozana y virginal en quien desahogar el apetito carnal...
El jesuita Girard conoce a la virginal Catherine Cadière, una joven muy religiosa en la que busca desahogar el apetito carnal. A quien se dispone robarle un beso en el confesionario.
Enseguida
el caliente jugo salival produjo sus efectos
lujuriosos: los pulsos acelerados, los ojos codiciosos síntomas
todos que son del amor señal.
Girard logra su objetivo, pero no piensa conformarse con un beso, y recurre al fiel aliado de los jesuitas, Satán.
Ahora la Cadière inflama sus fuegos y ninguna otra complace a su gusto: Para combatir el mal, según es justo, llama al demonio y conjura los infiernos.
Invisible,
ante la Cadière se agita, en trances y
convulsiones la precipita para luego, como político engañador sugerirle
que ha visto una visión.
Girard susurra a Cadière que una visión del cielo le ha dicho que si cede a sus deseos, será inundada de bendiciones espirituales y su santidad ampliamente recompensada, pero que es necesario "que se desnude por completo para azotar cada parte de su cuerpo".
Ahora con ímpetu más atrevido las ropas le alza hasta el cuello. Tres tiernos azotes ha recibido que ella acusa con agradecimiento.
Hecho esto, la espalda le frota luego y la besa, y también el trasero, y luego lo que no se nombra (...)
Montándola
enseguida, fogoso la cabalga al
tiempo que cosquillea partes privadas, mira, toca, ¿qué más queréis que
os cuente? mira, toca, otra vez repite la suerte.
Las exigencias de la santidad provocan a Cadière un embarazo no deseado, y tres meses más tarde se arrepiente.
Que
empieza a aborrecer la carne, se
arrepiente, pero ya es tarde, sus penas a Girard confesar querría, pero
él que no, que todo es tontería.
Girard le procura un aborto a Cadière y la recluye en un convento de monjas.
En su jardín con disimulo he entrado, un jardín que en todos los placeres abunda, y una rosa he robado de aquella espesura más preciosa que los tesoros mexicanos.
Kaewalin Winotaphan. ICE SIAM DREAM © |
Thérèse philosophe a Philosophie dans le boudoir.
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Thérèse philosophe a Philosophie dans le boudoir "Teresa Filósofa: una filosofía del tocador" (1748) de Jean-Baptiste de Boyer, marqués d´Argens. Basado en el proceso de Marie-Catherine Cadière contra su confesor, el jesuita Jean-Baptiste Girard. MADEMOISELLE ERADICE ENCIERRA A THÉRÈSE EN EL GABINETE, DESDE DONDE PUEDE VERSE SU HABITACIÓN, PARA HACERLA TESTIGO OCULAR DE SUS EJERCICIOS CON EL REVERENDO PADRE DIRRAG: "El santo padre va a venir" me dijo, y "Dios con él". Escóndete en este gabinete desde donde podrás oír y ver hasta dónde la bondad divina acepta extenderse a favor de su vil criatura a través de los cuidadosos piadosos de nuestro director espiritual”. DEMOSTRACIÓN FÍSICA DEL PADRE DIRRAG PARA CONVENCER A ERADICE DE SOPORTAR LA FUSTIGACIÓN SIN QUEJARSE: "Os lo dije querida hermana, olvidaos de vos misma y entregaos. Dios sólo quiere de los hombres el corazón y el espíritu. Es olvidando el cuerpo que se llega a la unión con Dios, a convertirse en santo, a obrar milagros… Cuando tocamos, oímos, vemos, etc., un objeto, partículas de espíritu corren por las pequeñas cavidades de los nervios que van a alertar el alma. Si tenéis suficiente fervor para reunir, con la fuerza de la meditación sobre el amor que debéis a Dios, todas las partículas de espíritu que están en vos, aplicándolas todas a este objeto, es seguro que no quedará nada de ellas para advertir al alma sobre los golpes que vuestra carne reciba, no lo sentiréis". EL PADRE ANUNCIA A ERADICE QUE LE HARÁ GOZAR UN TORRENTE DE DELICIAS POR MEDIO DE UN PEDAZO DEL CORDÓN DE SAN FRANCISCO QUE ÉL POSEE: "Comenzaremos, hija querida… cumplid vuestro deber y estad segura de que con ayuda del cordón de San Francisco y de vuestra meditación, este piadoso ejercicio terminará con un torrente de delicias inexpresables. Arrodillaos, hija mía, y descubrir esas partes de la carne que son motivo de la cólera divina: la mortificación que experimentarán unirá vuestro espíritu a él. Os lo repito, olvidaos de vos misma y entregaos". ERADICE DESCUBRE SUS NALGAS PARA RECIBIR LA DISCIPLINA DEL PADRE DIRRAG: "Mademoiselle Eradice obedeció de inmediato sin replicar. Se arrodilló en un reclinatorio con un libro ante sí. Luego, levantando sus faldas y su camisa hasta la cintura, dejó ver dos nalgas blancas como la nieve que formaban un óvalo perfecto, sostenidas por dos muslos de admirable proporción… Unid ahora vuestras manos y elevad vuestra alma a Dios, llenad vuestro espíritu con la idea de la felicidad eterna que os está prometida". EL PADRE DIRRAG LA FLAGELA RECITANDO ALGUNOS VERSÍCULOS: "Tras algunos minutos preguntó a su penitente si su alma había entrado en contemplación. "Sí, reverendísimo padre", le dijo ella, "Siento que mi espíritu se separa de la carne y os suplico comenzar la santa operación". "Eso basta", respondió el padre, "vuestro espíritu va a estar contento". SACA EL SUPUESTO CORDÓN DE SAN FRANCISCO: "Debéis estar ahora", dijo él, en el estado más perfecto de contemplación: vuestra alma debe permanecer separada de los sentidos. Si mi hija no engaña a mis santas esperanzas, ella ya no ve más, no oye, no siente"… En ese momento, este verdugo aplicó una lluvia de golpes sobre todas las partes del cuerpo de Eradice que estaban descubiertas. Mientras, ella no decía una palabra, parecía inmóvil, insensible a estos golpes terribles, y yo sólo distinguía en ella el movimiento convulsivo de sus dos nalgas que se cerraban y se abrían en cada momento. "Estoy contento de vos", le dijo el padre tras un cuarto de hora de esta cruel disciplina, "es tiempo de que empecéis a gozar del fruto de vuestros santos trabajos. No me escuchéis, hija, más dejad que os guíe. Prosternad vuestro rostro en el suelo, con el venerable cordón de San Francisco voy a sacar todo lo que queda de impuro dentro de vos". El buen padre la colocó en una actitud, humillante en verdad, pero también muy cómoda para sus intenciones. Nunca había tenido un espectáculo más bello: sus nalgas estaban entreabiertas y mostraban por completo la doble ruta de los placeres". EL PADRE ESTÁ CONFUNDIDO POR LA ELECCIÓN ENTRE LOS DOS ORIFICIOS QUE ERADICE LE PRESENTA. LA PRUDENCIA, IMPONIÉNDOSE SOBRE SU PREDILECCIÓN, LO HACE DECIDIRSE: "Dos orificios se le presentaban y los devoraba con los ojos, confundido ante la elección: uno era un delicioso bocado para un hombre de su profesión, pero él había prometido placer y el éxtasis a su penitente. ¿Qué hacer? Osó dirigir varias veces la cabeza de su instrumento hacia la puerta favorita, a la que golpeaba ligeramente. Pero al final la prudencia se impuso sobre la predilección". ERADICE Y EL PADRE DIRRAG DESFALLECEN DE PLACER. LA MUCHACHA CREE GOZAR DE UNA FELICIDAD PURAMENTE CELESTIAL: "¿Está contenta vuestra mente, mi pequeña santa? ", dijo exhalando en un suspiro. "En cuanto a mí, veo los cielos abiertos, la gracia suficiente me eleva, yo…" "¡Ah! ¡Padre mío!", exclamó Eradice "¡qué placer me penetra! Si gozo de la felicidad celestial, siento que mi alma está del todo separada de la materia. Sacad, padre mío, sacad todo lo que en mí queda de impuro. Veo… los án… geles. Empujad más… Empujad pues… ¡Ah! … ¡Ah! … buen San Francisco. ¡No me abandonéis! ¡Siento el cor… el cor… el cordón… no puedo más… me muero!"… "¡Ah! Querida Thérèse, comparte mi felicidad: sí, he visto el paraíso abierto, he participado en la felicidad de los ángeles. ¡Cuántos placeres, amiga mía, por un momento de sufrimiento! Por la virtud del santo cordón mi alma casi se separa de la materia".
Kuromiya Rei © |
Autor del texto: Armando Ossorio ©
※ XPOFERENS ※
"Pero ¿qué es el Grial? Para empezar, una leyenda más sobre Jesús, sólo que lo bastante amplia y articulada para llenar un ciclo literario. En la epopeya medieval, el misterioso Grial adquiere dos significados: es el nombre del cáliz que se utilizó en la Última Cena, la bandeja donde Jesús y sus Discípulos comieron el cordero pascual, la copa en que José de Arimatea, después de la crucifixión, recogió la sangre del Salvador que luego llevó a Occidente acompañado de María Magdalena, que había sido esposa de Cristo y era madre de un hijo suyo. Según las circunstancias, el Grial también ha sido concebido como el plato en que los fieles participaban en la fiesta común o la copa yuxtapuesta a la lanza, símbolos transparentes de las energías masculina y femenina, fuentes de la vida. La tradición cristiana cuenta, al menos, con dos recipientes sagrados: el cáliz de la eucaristía y la Virgen María. En la Letanía de Loreto, se describe a la Virgen como vas spirituale, vas honorabile, vas insigne devotionis, esto es, "vaso espiritual", "vaso de honor", "vaso de insigne devoción", puesto que en el vientre (el útero, es decir, el vaso) de María, la divinidad se transformó en carne".
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